«El Servicio Federal de Seguridad (…) ha iniciado y está investigando una causa penal en virtud de la sección 3 del artículo 322 del Código Penal ruso contra los periodistas extranjeros Simone Traini y Stefani Battistini, que cruzaron ilegalmente la frontera estatal (…) y filmaron en el territorio de la ciudad de Sudzha, región de Kursk», indica el informe.
Además, se realiza una evaluación jurídica de los materiales difundidos en los medios de comunicación, que indican que el corresponsal extranjero Nick Peyton Walsh estuvo presente en el puesto de control ruso de Sudzha, y a raíz de ello se adoptará una decisión procesal.
Rusia continúa, desde el 24 de febrero de 2022, una operación militar especial con el objetivo de defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev, y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
El pasado 6 de agosto, las tropas ucranianas iniciaron una incursión armada en la región rusa de Kursk y ocuparon varias áreas. Desde el día 9 de ese mismo mes, la región vive una situación de emergencia a nivel federal.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, prometió «una digna respuesta» a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial.