«Son absolutamente infundados los intentos de Kiev y Occidente de desviar el foco de sus ataques terroristas hacia la supuesta responsabilidad de Rusia por dañar instalaciones de varias misiones diplomáticas extranjeras en la capital ucraniana», aseveró la vocera.
Según el Ministerio de Defensa ruso, «los problemas para los diplomáticos los crea el uso de sistemas de defensa antiaérea occidentales por parte de los ucranianos», mientras que «los misiles rusos atacan exclusivamente objetivos militares», indicó Zajárova.
En este sentido, la representante de la Cancillería recordó que el 18 de diciembre Kiev había atacado la empresa Kombinat Kámenski en la región de Rostov con seis misiles tácticos operativos estadounidenses Atacms y cuatro misiles de crucero británicos Storm Shadow.
En respuesta a estas acciones, las Fuerzas Armadas rusas alcanzaron con armas de alta precisión un centro de control del Servicio de Seguridad de Ucrania y la planta de producción de armas Luch en Kiev, evocó la portavoz.