La corporación nuclear estatal rusa Rosatom planea demandar a la compañía alemana Siemens por no entregar el equipo previsto para la central de Akkuyu que Rusia está construyendo en Turquía.
El director general de la empresa rusa, Alexéi Lijachov, precisó en declaraciones al canal Rossiya 24 que el equipamiento necesario ha sido adquirido a fuentes alternativas de suministro para continuar el proyecto de la primera central nuclear de Turquía.
«Obviamente habrá demandas. El equipo prepagado no se entregó. Nos ha supuesto costes adicionales tanto por la compra del equipo concreto como por los ajustes al calendario de instalación de ese equipo. Esas demandas se presentarán», afirmó Lijachov.
El proyecto nuclear en la provincia turca de Mersín, a orillas del mar Mediterráneo, se está llevando a cabo sobre la base de un acuerdo intergubernamental firmado entre Moscú y Ankara en mayo de 2010. Las obras las realiza la empresa Akkuyu Nuclear, que es propiedad de Rosatom.
Con un coste total de unos 20.000 millones de dólares, la planta, de cuatro reactores de 1.200 MW cada uno, cubriría el 10 % de la demanda eléctrica del país cuando esté completamente operativa en 2028.
Inicialmente, la puesta en marcha de la primera unidad estaba programada para el año pasado. Lijachov reconoció al respecto que las sanciones occidentales han planteado problemas, sobre todo en lo que respecta a las transacciones financieras y la adquisición de equipos.
Al mismo tiempo, indicó que el incidente con Siemens no tiene por qué causar demoras mayores de tres meses, mientras que el avance general de las obras no se desvía de lo planeado.
