El ejército libanés ha iniciado un despliegue en ciudades del sur del Líbano, entre ellas Al-Qauzah, Yater, Beit Lif y las afueras de Ramya, en el distrito de Bint Jbeil, tras la retirada de las fuerzas de ocupación israelíes. Las unidades también se trasladaron a Al-Naqura y Al-Bayyada, en el distrito de Tiro, y establecieron una presencia en esas zonas.
El ejército anunció el 7 de enero su despliegue en varias localidades del sur, como Ras Al-Naqura, Alma Al-Shaab, Tayr Harfa (Tiro), Beit Lif (Bint Jbeil) y otras ciudades de los sectores occidental y central, recuperando así el territorio que habían dejado las fuerzas sionistas.
En Al-Naqura, unidades especializadas siguen realizando operaciones para limpiar municiones sin detonar, retirar escombros y reabrir carreteras. Estas actividades se están llevando a cabo en coordinación con la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) y el comité de cinco naciones que supervisa el acuerdo de alto el fuego.
A pesar del acuerdo de alto el fuego, las fuerzas de ocupación israelíes lanzaron granadas aturdidoras hacia la ciudad de Ayta Al-Shaab, intentando intimidar a los civiles que entraban en la zona. El ejército libanés había advertido previamente a los residentes que esperaran a que se completaran las operaciones militares de limpieza antes de regresar.
En el sector oriental, el despliegue previsto del ejército en el sitio de la colina Al-Hamames enfrentó retrasos debido a la demora del enemigo israelí. Mientras tanto, se observó que los vehículos militares de la ocupación israelí avanzaban por la carretera Abu Zainab-Tal Al-Nahhas hacia el asentamiento de Metula, lo que indicaba que había actividad en curso en la zona.
El corresponsal de Al-Manar recorrió la zona de Wadi Al-Oyun y llegó a la ciudad de Hanin para evaluar su estado y los daños causados por la agresión israelí.
Un vídeo que circula muestra a los vehículos del ejército libanés entrando en la ciudad de Ramya en medio de la destrucción generalizada causada por los ataques israelíes.
Las violaciones israelíes persisten en el sur del Líbano
Las fuerzas de ocupación israelíes continúan sus violaciones en el sur del Líbano, según informó el corresponsal de Al-Manar. El ejército sionista llevó a cabo una explosión cerca de las afueras de Alma Al-Shaab y construyó movimientos de tierra adicionales a lo largo de una carretera militar recién establecida que conecta el sitio de Al-Duhaira con una nueva posición al oeste de la ciudad.
En el sector oriental, se observó a las fuerzas de ocupación israelíes moviendo vehículos desde la colina de Al-Hamames hacia el área de Metula. Si bien se habían mantenido conversaciones sobre el reposicionamiento del ejército libanés en la colina de Al-Hamames cerca de Jiam, las demoras israelíes han obstaculizado el progreso.
Se intensifica vigilancia con drones
Los drones de la fuerza de ocupacion, incluidos los modelos Hermes 450 y Hermes 900, reanudaron la vigilancia a gran altitud sobre las áreas fronterizas, coincidiendo con el despliegue en curso de unidades del ejército libanés a lo largo de la frontera sur.
Avanza el despliegue del ejército libanés
El ejército libanés está dispuesto a establecer puestos de control militares como parte de su fase de despliegue inicial. Esto restringirá el acceso de los civiles debido a los daños significativos causados por los recientes ataques aéreos y operaciones con excavadoras israelíes, así como por la presencia de municiones sin detonar. Las unidades de ingeniería del ejército realizarán redadas exhaustivas para asegurar las áreas antes de que se permita el regreso de los civiles.
El despliegue se ampliará a otras localidades, incluidas Blida y Mays Al-Yabal, y acabará cubriendo todo el sector oriental. Esta presencia es crucial para estabilizar la región y garantizar la seguridad tras semanas de agresión israelí.
