Al presentar las prioridades de trabajo del organismo mundial para 2025 ante la Asamblea General, Guterres dijo que se abrieron “los males de la caja de Pandora moderna” y mencionó entre estos los “conflictos galopantes, desigualdades vertiginosas, crisis climática y la tecnología fuera de control».
Guterres reconoció que si no se toman acciones efectivas por los países miembros, las mencionadas amenazas trastornaran la agenda de trabajo del organismo y, “en el peor de los casos, pondrán patas arriba nuestra propia existencia”, registró.
El diplomático enumeró las principales problemáticas que enfrenta el mundo entre las que destacan la situación en Gaza, el conflicto en Sudan, el peligro nuclear, los problemas en Oriente Medio, las industrias fósiles responsables de la crisis climática, e incluyó a la inteligencia artificial de la que comentó que “si bien ofrece oportunidades sin precedentes necesita asimismo una gestión prudente».
Finalmente, Guterres alentó a los países miembros a trabajar arduamente y recordó la responsabilidad histórica que tiene la ONU en la resolución de conflictos, el mantenimiento de la paz y el desarrollo.