El Gobierno español ha decidido movilizar cerca de 3.000 soldados para participar en el ejercicio Steadfast Dart 2025, que se llevará a cabo en Rumania, Bulgaria y Grecia entre el 10 y el 21 de febrero de 2025. En este ejercicio multinacional, el ejército español contribuirá con unidades de sus Ejércitos de Tierra, Armada y Aire, y un general español será el encargado de liderar el componente de Operaciones Especiales. La misión, supervisada desde el cuartel de la OTAN en Nápoles (Italia) tiene como objetivo probar la capacidad de despliegue y refuerzo de la Fuerza de Reacción Rápida Aliada (ARF) en el sudeste de Europa, con un claro mensaje amenazante hacia Rusia, especialmente en relación con la situación en Ucrania.
Este ejercicio, que contará con la participación de un total de 10.000 soldados de nueve países aliados, se centrará en operaciones multidominio que abarcarán tierra, mar, aire y operaciones especiales. Grecia será responsable de las operaciones marítimas, Bulgaria de las Operaciones Especiales y el componente aéreo, mientras que Rumania acogerá el despliegue terrestre. Las unidades españolas, que comenzarán su despliegue ya comenzaron su despliegue el pasado 16 de enero, incluyen 732 militares destinados a Rumania, 1.400 soldados de la Armada y un grupo anfibio a bordo del buque insignia Juan Carlos I para las operaciones en Grecia, y un avión de carga A400 del Ejército del Aire y del Espacio con 40 militares.
El ejercicio Steadfast Dart 2025 es el primero en el que se pondrá a prueba la ARF desde su creación en 2024, y se considera “un paso crucial en la consolidación de la defensa colectiva de la OTAN” en la región del Este de Europa. A pesar de la tensión persistente derivada de la guerra de Ucrania, la OTAN busca reforzar su capacidad operativa en el área, destacando la amenaza de escalada militar.
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