En el encuentro, desarrollado en la sede nacional de la FMC, en esta capital, su secretaria general, Teresa Amarelle, destacó que el principal objetivo de la organización que agrupa alrededor de cuatro millones 400 mil mujeres a partir de los 14 años, es lograr la igualdad de género y la «transformación real» de las mujeres cubanas. Explicó que a pesar de ser una organización de masas no gubernamental, cuenta con respaldo constitucional, capacidad para impulsar iniciativas legislativas y de reformas, además de personalidad jurídica, y recordó que el parlamento cubano está conformado en el 55,7 por ciento por mujeres.
Sobre el quehacer de la FMC, mencionó varias de las medidas existentes o en proceso de establecimiento, para el apoyo a las federadas que lo necesitan, como el otorgamiento de viviendas libres de costo, pensiones o ayuda material, entre otros beneficios, lo cual ha beneficiado a unas seis mil mujeres.
Se aprobó también un decreto llamado «Estrategia Integral para la Prevención de la Violencia», que es más abarcador y tiene un enfoque de derecho humanos, apuntó.
Señaló la dirigente femenina que existen medidas en el país con el objetivo de solventar estos problemas sociales, como la Ley de Salud Pública, que se refiere de manera completa a los derechos sexuales, y reafirmó que la Constitución de la República transversaliza la igualdad de género.
«En Cuba tenemos voluntad política para hacer más propuestas en la medida en que los recursos aparezcan, para avanzar en la lucha por la igualdad de género», afirmó tras denunciar las consecuencias negativas del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la isla, sobre las iniciativas en ese sentido.
Amarelle reconoció que a pesar de los avances científicos y sociales logrados por Cuba, esas medidas coercitivas limitan el completamiento de muchos proyectos y servicios fundamentales en el proceso.
Agradeció a los embajadores el apoyo de sus gobiernos en contra del bloqueo, que a su consideración afecta en mayor medida a las mujeres y las familias de Cuba.
De igual modo, ofreció detalles sobre la colaboración de naciones como Canadá e Italia en proyectos humanitarios que permitirán la atención integral a mujeres y niñas en más de 40 municipios cubanos, y facilitan a la organización herramientas y mecanismos para contribuir a erradicar la violencia de género.
Varios participantes en el encuentro agradecieron los esfuerzos de Cuba en favor de las mujeres, en medio de la compleja situación económica de esta nación caribeña, profundizada por el cerco estadounidense, y expresaron el interés de colaborar con la organización.