Putin destacó que las dificultades forzaron a las empresas nacionales a acercarse más a la ciencia local, para encontrar soluciones innovadoras y fortalecer el desarrollo interno. Según el mandatario, esta situación ha motivado el impulso hacia la autosuficiencia y la capacidad de enfrentar las adversidades mediante el talento y conocimiento nacional.
Asimismo, Putin señaló que se han logrado avances en la sustitución de tecnologías en sectores clave, pero en la industria química aún no es suficiente. En este ámbito, hizo un llamado a mejorar la competitividad global, mientras aseguró que Rusia no solo debe ofrecer productos que compitan en precio y calidad, sino también innovadores, para no quedar rezagada frente a la competencia internacional.
En este sentido, Putin pidió una reflexión interna sobre cómo regular la interacción entre las empresas rusas y las de otros países, especialmente dentro del marco de la Organización Mundial de Comercio. A pesar de las dificultades impuestas por esta institución, el presidente enfatizó la necesidad de proteger los intereses económicos de Rusia, en un contexto de competencia internacional cada vez más desafiante.
La resistencia de la economía rusa a las sanciones «deja atónitos» a los que presagiaban su declive
En este contexto, el canciller Serguéi Lavrov destacó que el nuevo estado de la economía rusa ha permitido descubrir la utilidad de explorar tecnologías nacionales, las cuales, en algunos casos, son incluso superiores a las occidentales.
Tras la reunión de ministros de Exteriores del G20, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, subrayó que el retorno de las empresas extranjeras debe hacerse de manera controlada, de tal manera que se permita el ingreso en sectores donde no representen riesgos para la economía rusa.
Mala noticia para los sancionadores yanquis y europeos: la economía rusa crece aceleradamente
