El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados condenó en un comunicado la postura global ante “la actual guerra de genocidio, el desplazamiento y la anexión (de tierras) contra nuestro pueblo”.
Asimismo, cuestionó la escalada de violencia, la demolición de viviendas, la política de hambre y sed, así como la negación de los derechos humanos básicos a los palestinos.
La permisividad del mundo a esas acciones alienta al gobierno de Benjamin Netanyahu a “implementar sus planes coloniales racistas sin presión efectiva ni rendición de cuentas”, aseguró.
El texto acusó a ese país de intentar destruir los cimientos de la existencia política y cultural del pueblo palestino.
Ante esa situación, instó a aplicar el derecho internacional para proteger a los habitantes de Gaza y Cisjordania.
En ese sentido, reclamó una solución justa basada en las resoluciones sobre el tema del Consejo de Seguridad de la ONU, que incluyan la creación de un Estado palestino con Jerusalén este como su capital.
Cierto! La indiferencia hacia este genocidio con el pueblo palestino es vergonzoso. Los organismos internacionales no resuelven nada y permiten a Netanyahu y su séquito cometer esta atrocidad!