El presidente de Francia, Emmanuel Macron anunció este lunes el inicio del plan Muro de Hierro, su nueva estrategia en contra de los inmigrantes.
«Iniciamos ahora la operación llamada Muro de Hierro (…) Es una cortina de hierro, basado en un plan preparado por nuestros militares y nuestras fuerzas de seguridad», subrayó el mandatario en un discurso pronunciado en en la isla de Mayotte, localizada en el Canal de Mozambique, por dónde llegan la mayoría de los migrantes.
Siguiendo esa línea, Macron indicó que «el objetivo es impedir mejor la llegada de inmigrantes y detener embarcaciones que provienen de Tanzania y otros países«.
Por otro lado, el presidente solicitó que se aumentara a 35.000 las deportaciones anuales desde esa isla.
Para llevar adelante el plan antimigratorio, Macron detalló que se desplegarán «equipos y lanchas para interceptar embarcaciones con inmigrantes».
Agregado a ello, el dignatario puntualizó que se crearán «centros de acogimiento para estas personas» y otras medidas que se aplicarán antes de que culmine el año.
Vale acotar que a la isla de Mayotte arriban grupos de migrantes que llegan desde las Islas Comoras.
De acuerdo con datos oficiales, en enero de 2022 la población de Mayotte ascendía a 300.000 personas por la llegada de migrantes.
Sustentado en ideologías antimigrantes, el Gobierno francés durante el 2022 llevó adelante una operación que supuestamente buscaba «erradicar los barrios pobres de la isla, en los que viven básicamente oriundos de las Comoras» y con ello «deportar a los inmigrantes irregulares»
Pero estas «cortinas», «muros», «vallas» o «alambradas» (*) o como quieran llamarlos son buenos, no como aquel Muro de Berlín puesto por los «malvados» comunistas.
(*) Aunque miles de personas mueran intentando cruzarlos.