La política actual de la Unión Europea «apesta desde la cabeza», cuya personificación es la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, así lo afirmó este sábado un artículo en la revista suiza Die Weltwoche.
La disputa comercial con EE.UU., el conflicto ucraniano, las tensiones con Rusia y los problemas internos con los países miembros que se han mostrado en desacuerdo con la posición de la UE «no hablan en favor de las habilidades diplomáticas» de Von der Leyen, describe la publicación.
«En resumen, la UE se encuentra en una situación lamentablemente mala. En un Estado normal, la gente se preguntaría si el liderazgo actual sigue siendo el correcto, pero la UE no es un Estado y mucho menos uno normal», escribe la revista. Además, añade que en los círculos diplomáticos «se rumorea que altos funcionarios de la UE consideran cada vez más toxica a Von der Leyen y que una dimisión podría destrabar muchas cosas«.
En este sentido, consideran que «un cambio en la cúspide daría al menos a la política europea la oportunidad de volver a ser más diversa y abierta, tanto hacia Occidente como hacia Oriente».
Los comentarios sobre el descontento de los países miembros con Von der Leyen cada vez son más frecuentes. En febrero, dos diplomáticos europeos aseguraron a Politico que varios líderes de la UE estaban cansados del «estricto control» que la presidenta de la CE ejercía sobre la política exterior y de su toma de decisiones presupuestarias unilaterales.
Asimismo, el medio indicó que, durante su primer mandato, Von der Leyen tuvo relaciones «difíciles» con varios líderes de la UE. En este sentido, su gestión se ha vuelto cada vez más centralizada, con ella gobernando de manera casi presidencial, ejerciendo un control absoluto sobre la toma de decisiones y una supervisión estricta de las comunicaciones dentro del bloque.
