
La aviación rusa se ha unido a la extinción del incendio tras una explosión que azotó el pasado sábado el puerto iraní de Shahid Rajai, en la ciudad de Bandar Abbás, en el golfo Pérsico, según informó el Ministerio de Emergencias de Rusia este martes.
«La aviación del Ministerio de Emergencias ruso, compuesta por dos aviones Be-200ChS e Il-76, llegó el día anterior para ayudar a eliminar las consecuencias de un gran incendio en Irán. Arrojaron cerca de 130 toneladas de agua en 13 vertidos», reza el comunicado.
Se enviaron los aviones a Bandar Abbás por orden del presidente ruso, Vladímir Putin, y del ministro de Emergencias, Alexánder Kurenkov.
La enorme explosión en el puerto más grande de Irán dejó, según indican las últimas cifras, 70 muertos y más de 1.200 heridos. El ministro del Interior de Irán, Eskandar Momeni, señaló que la causa de la explosión fue una negligencia e informó que los culpables fueron encontrados. Las investigaciones en torno al accidente continúan.