Agrupadas en el Gran Movimiento de Movimientos Josefa Joaquina Sánchez y en la Gran Misión Venezuela Mujer, las féminas se pronunciaron con “indignación y dolor” por la retención de la menor, que calificaron de acto inhumano y violador de los derechos fundamentales de la infancia.
Además de perpetuar la violencia sistemática contra las mujeres y familias venezolanas, añadió.
“Nos solidarizamos profundamente, con su madre Yorelis Bernal, y con todas las madres de migrantes venezolanos que han sido víctimas de prácticas tan dolorosas”, declaró la nota.
Indicó que lo ocurrido a esta familia es “un caso más del extenso y cruel proceso de criminalización de la migración” nacional, la cual, luego de ser alentada alevosamente para dañar al país, hoy se instrumentaliza para atacar y perseguir a los venezolanos en tierra estadounidense.
Las féminas bolivarianas dijeron no tener dudas de que estas acciones “son parte de una estrategia de guerra que tiene como primer objetivo a las mujeres venezolanas”.
Manifestaron que ellas enfrentan el peso de la separación familiar, el desarraigo y la violencia generada por estas acciones, las cuales “violentan todo el entramado jurídico” y que, a pesar de ello, todavía no recibe una contundente condena de los organismos internacionales correspondientes.
Las mujeres venezolanas, organizadas y unidas, rechazamos categóricamente estas prácticas que buscan deshumanizar a los migrantes venezolanos y separar a la familia, pilar esencial de identidad de nuestra sociedad, señalaron.
En tal sentido, exigieron justicia para Maikelys Espinoza, violentamente separada de su entorno afectivo, y su inmediata reunificación con su madre, su padre, y su familia en Venezuela.
También demandaron el cese de estas violaciones flagrantes a los derechos humanos por parte del gobierno de Donald Trump y el respeto irrestricto a los principios consagrados en la Declaración Universal de los Derechos del Niño y la Carta de Naciones Unidas.
“Hoy, las mujeres venezolanas nos levantamos como una sola voz para decir basta de violencia, basta de separación y de atropellos”, nuestra lucha es por la vida, la familia, por la justicia y dignidad de cada niño, madre, padre y familia venezolana.
Asimismo, reafirmaron que seguirán la lucha hasta que se haga justicia con Maikelys Espinoza y «se respeten los derechos de nuestras familias».