
Alina Perera Robbio (Granma).— Luego de cumplir con una intensa agenda de poco más de 24 horas en la ciudad de San Petersburgo, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, llegó ayer martes, al filo de las tres de la tarde (hora local), a la capital del país euroasiático.
En el Aeropuerto Internacional Vnúkovo, el Jefe de Estado fue recibido por el viceministro de Relaciones Exteriores, Sergey Ryabkov, y también por Igor Bogdashev, director del Departamento de Protocolo del Estado.
Como parte de un programa que da respuesta a la invitación extendida por su homólogo Vladímir Putin, el Presidente Díaz-Canel está en la Federación de Rusia, entre otras motivaciones, para celebrar los 65 años
–que se cumplirán este 8 de mayo– del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre la Mayor de las Antillas y el hermano país; y para participar en el tradicional desfile en la Plaza Roja de Moscú, este 9 de mayo, que recordará al mundo los 80 años de la Gran Victoria del pueblo ruso sobre las hordas fascistas.
Se espera que en estas horas, en la urbe moscovita, el dignatario cubano sostenga intercambios con la alta dirigencia del hermano país –agenda que incluye un encuentro con Vladímir Putin–. Igualmente, está previsto que visite importantes sedes de la nación; que rinda tributo al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, en el barrio moscovita de Sokol, en el cual fue emplazada una escultura hecha al líder cubano, y que lo ha convertido en lugar de homenaje.
Moscú, majestuosa, ya está engalanada con banderas rojas en vísperas del histórico 9 de mayo. Se espera que el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba participe en el desfile que rendirá honores a la Gran Victoria, en la Segunda Guerra Mundial, sobre las fuerzas fascistas, y que significó un vuelco salvador para la humanidad.