La ponencia que finalmente se analizó, fue la radicada por la presidenta de esa instancia, Angélica Lozano, después de que la presentada por la senadora Aída Avella, del Pacto Histórico, se hundió por falta de respaldo.
Esta última buscaba recuperar algunos de los puntos del proyecto de ley original presentado por el Gobierno y planteaba, entre otras cuestiones, que las horas nocturnas comenzaran a partir de las 18 horas, pero el texto aprobado dispone que empiece a las 19 horas, pero conservó en su articulado el recargo dominical y festivo al ciento por ciento.
No obstante, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, declaró que la plenaria, el Gobierno insistirá en que se apruebe una jornada nocturna que comience a las 18 horas y no a las 19, tal como lo desean las centrales obreras.
Uno de los puntos más polémicos fue el relacionado con la reglamentación del contrato para estudiantes del Servicio Nacional de Aprendizaje que pasarían a tener una remuneración del 75 por ciento del salario mínimo en la fase lectiva y del ciento por ciento en la etapa práctica.
En tanto, el presidente del país, Gustavo Petro, comentó que aún si se aprobase un buen texto, sigue en pie el llamado a una consulta popular, cuyo detonante fueron los obstáculos enfrentados en el Legislativo por la reforma laboral.
“Queda la plenaria del Senado, queda la conciliación, y ya sabemos que nos hacen trampas, sobre todo cuando las cosas pasan a manos del presidente del Senado (Efraín Cepeda)”, afirmó.