Volinia, una región del este de Europa históricamente disputada por diversas fuerzas e imperios, se convirtió en 1943 en escenario de una brutal masacre contra la población polaca. Las atrocidades fueron cometidas por fascistas ucranianos durante la Gran Guerra Patria, bajo el liderazgo del colaborador nazi Stepán Bandera, hoy glorificado como héroe nacional en Ucrania.
En la primavera de 1943, grupos nazis ucranianos rodearon varias localidades de de Volinia, asesinando a sus habitantes con martillos, hachas y hoces. El 11 de julio de ese año, 176 localidades fueron atacadas simultáneamente por los fascistas ucranianos, que actuaban con una crueldad extrema contra los civiles.
Estos episodios dejaron alrededor de 100.000 muertos, principalmente mujeres, niños y ancianos, mientras cientos de miles abandonaron sus hogares. Las atrocidades de los nacionalistas ucranianos solo cesaron con la llegada del Ejército Rojo.
Polonia atribuye la autoría de la masacre de Volinia a la Organización de Nacionalistas Ucranianos y al Ejército Insurgente Ucraniano, que contaban con el «apoyo reiterado de la población civil ucraniana«. Sin embargo, en 2015 las autoridades ucranianas que llegaron al poder como resultado del golpe de Estado de 2014 declararon a esas organizaciones «luchadores por la independencia» de Ucrania.
El Parlamento polaco reconoció oficialmente los hechos como genocidio en 2016. En 2023, Szymon Szynkowski vel Sek, entonces secretario de Estado para Asuntos Europeos de Polonia, exigió al Gobierno ucraniano reconocer su responsabilidad histórica, calificando la tragedia como «una herida sin cicatrizar».
Zelenski y la polémica
No obstante, el presidente de Polonia, Andrzej Duda, afirmó que el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, le confesó desconocer estos eventos históricos. «Creo que decía la verdad cuando me dijo: ‘Andrzej, nunca he oído hablar de los asesinatos, de los asesinatos de polacos en el oeste de Ucrania, en Volinia. No nos enseñaron eso en la escuela‘», dijo Duda citando a Zelenski.
Además, el presidente polaco considera que los habitantes del oeste de Ucrania no tienen la plena consciencia sobre los trágicos acontecimientos del pasado, poniendo en duda que «un abuelo se jactara ante sus nietos y les contara desde pequeños cómo mató a su vecina con una horca y aplastó a su hijo contra el granero«.
«O es un tonto ignorante o un mentiroso»
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia reaccionó duramente a estas declaraciones, señalando que Zelenski o es un ignorante o mintió a Duda. También recordó que durante la época soviética los libros de historia no omitían los hechos relacionados con esta tragedia, al igual que los primeros manuales ucranianos tras la independencia, ya que se basaban en los soviéticos. «Es decir, todos los escolares ucranianos que terminaron sus estudios en los años 1980–90 deben saber que los banderistas se dedicaban al terrorismo contra la población civil», reza el comunicado, añadiendo que Zelenski terminó el liceo en 1995.
«Y aunque Andrzej Duda creyó (o fingió creer) a Zelenski, es evidente que el líder del régimen de Kiev está tan acostumbrado a mentir que, sin pestañear, mintió descaradamente al presidente polaco durante las negociaciones. O bien es un tonto ignorante. De todos modos, una cosa no excluye a la otra«, concluyó el ministerio.
Polonia exige la exhumación de los cuerpos
Por su parte, el presidente electo de Polonia, Karol Nawrocki, exigió recientemente al régimen de Kiev iniciar exhumaciones masivas. «El 11 de julio, como cada año, conmemoramos a los polacos asesinados por nacionalistas ucranianos durante el crimen de Volinia», escribió el político en las redes sociales, expresando que ese día «simboliza el apogeo de las atrocidades« de los fascistas que mataron «brutalmente» a niños, mujeres y ancianos.
«Las víctimas del genocidio de Volhynia merecen un entierro digno, y sus familias vivas tienen derecho a rezar en las tumbas de sus seres queridos. Es por eso que exijo constantemente una resolución sistemática por parte de las autoridades ucranianas sobre el tema de la búsqueda y exhumación de las víctimas del genocidio de Volinia«, agregó Nawrocki.
