En tal sentido especialistas del Centro de Ingeniería Ambiental y Biodiversidad (Ciba) de Morón, en Ciego de Ávila, acometen un proyecto para rehabilitar y preservar las dunas de Playa Pilar en Cayo Guillermo, consideradas las más altas del Caribe Insular.
La especialista de Bioingeniería Ambiental del Ciba, Marisleys Castro, líder del programa encaminado al desarrollo de un turismo sostenible en la región, señaló que en días recientes plantaron unas 600 posturas autóctonas de diferentes variedades, mediante la técnica de reproducción en tubetes.
Manifestó que la vegetación de las colinas, además, de mantener la armonía ecológica de la zona, posibilita retener la arena, ante eventos hidrometeorológicos extremos, al disipar la energía del oleaje y fuertes vientos, por lo que evita erosiones ante los efectos del cambio climático y desastres naturales.
Declarada área protegida con categoría de Elemento Natural Destacado, las dunas de Cayo Guillermo, con una altura de 15 metros sobre el nivel del mar, resalta por los valores paisajísticos que ofrece a Playa Pilar, considerada entre los balnearios más lindos de la región.
Administradas por la Empresa Provincial de Flora y Fauna, las colinas se extienden por unas 35 hectáreas de las costas aledañas a los hoteles Iberostar Playa Pilar y Playa Luxury Cayo Guillermo y son el refugio de seis especies de reptiles (algunos endémicos) y 69 variedades de aves, tanto residentes como migratorias.
En Jardines del Rey también se encuentran las dunas Loma del Puerto, con 10 y 14 metros, las segundas de mayor altura del área y pertenecen a la Reserva Ecológica Centro Oeste de Cayo Coco, área protegida por su alto valor faunístico y buena conservación.
Las dunas son ecosistemas dinámicos, variables y muy frágiles, expuestos a la vulnerabilidad de los cambios climáticos, de los fenómenos atmosféricos y de la actividad humana, por lo que su restauración es vital para mantener el equilibrio dinámico que hace posible la existencia de la playa.