Según fuentes oficiosas, la asociación que agrupa a más de 30 organizaciones, sindicatos y colectivos de la educación, se mantiene en el lugar para exigir al Gobierno de España la aprobación del decreto ley de embargo de compraventa de armas a Israel.
Junto con demandar también la ruptura de relaciones diplomáticas con el régimen de Tel Aviv, Marea Palestina se constituyó en asamblea permanente en una concentración iniciada a las 14:30 hora local en la sede de la institución cultural.
“De aquí no nos vamos a mover”, afirmó Carlos Díez, profesor de secundaria que forma parte del colectivo educativo contra el genocidio, del que forman parte además personas del entorno de la cultura.
Marea Palestina aspira a que se aprueben declaraciones de los claustros de profesores en toda España en favor del embargo y se rompan de inmediato relaciones diplomáticas y comerciales con Israel.
“Ante los crímenes que Israel está cometiendo en Gaza, la educación emerge como herramienta indispensable para combatir la deshumanización y defender la dignidad humana (…) hacemos un llamamiento urgente al conjunto de los claustros y consejos escolares de todo el estado español, que deben regirse por principios éticos, humanitarios y de justicia”, escribió el colectivo en una declaración.
Añadieron que “es necesario que la Marea Palestina arrastre el silencio y retire el manto de indiferencia que ha cubierto este genocidio sin parangón en el siglo XXI, del que está siendo víctima mayoritariamente la población civil”.
Por otro lado, varias personas con banderas en solidaridad con Palestina, protestaron este martes contra la presencia del equipo Israel–Premier Tech que participa en la Vuelta Cilcista a España.
Lo hicieron al paso de una etapa por la localidad navarra de Lumbier, portando banderas palestinas y coreando la consigna ‘Palestina Askatu’ (Palestina Libre).