Sergéi Lavrov.— Considero necesario dirigirme a ustedes para hacer un llamamiento relativo a las afirmaciones del Reino Unido, Francia y Alemania sobre que supuestamente han activado el “mecanismo de reactivación de sanciones” en el contexto de la cuestión nuclear iraní. También me gustaría llamar su atención sobre la votación del proyecto de resolución del Consejo de Seguridad presentado por la República de Corea relativo a la prórroga del régimen de levantamiento de las sanciones de las Naciones Unidas contra el Irán que tuvo lugar el 19 de septiembre de 2025, así como sobre la votación del 26 de septiembre de 2025 sobre el proyecto presentado por China y Rusia relativo a la prórroga de la resolución 2231 (2015) del Consejo de Seguridad.
Durante las citadas sesiones del Consejo de Seguridad, los Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, apoyados por varios miembros no permanentes del Consejo, votaron en contra de ambos proyectos, y se manifestaron así en contra de ofrecer más margen de negociación en el contexto de la cuestión nuclear iraní. Lamentablemente, a pesar de todos los enérgicos esfuerzos diplomáticos de las dos últimas semanas y de la disposición del Irán a participar en la búsqueda de una solución, los Estados mencionados rechazaron todos los compromisos y optaron por una trayectoria de escalada.
Paralelamente, el Reino Unido, Francia y Alemania han seguido insistiendo en la validez de su supuesta notificación de “reactivación de sanciones” que se distribuyó en el Consejo de Seguridad el 28 de agosto. Sus afirmaciones no pueden estar más lejos de la realidad. Rusia ha aclarado en repetidas ocasiones que esta notificación es nula y carece de valor, y que no puede considerarse una notificación presentada de conformidad con el párrafo 11 de la resolución 2231 (2015) del Consejo de Seguridad, como se indica, entre otras cosas, en la carta que les dirigieron los Ministros de Relaciones Exteriores de Rusia, China y el Irán de fecha de 28 de agosto. Por tanto, no cabe duda de que el proyecto de resolución sometido a votación el 19 de septiembre por la Presidencia del Consejo no cumple los requisitos de la resolución 2231 (2015), y el resultado de su examen no puede suponer el restablecimiento de las sanciones de las Naciones Unidas contra el Irán. Por ese motivo, no puede considerarse que se haya activado el citado procedimiento de “reactivación de sanciones”.
Los esfuerzos de los Estados occidentales por mantener lo contrario solo demuestran que están tratando desesperadamente de legitimar sus anteriores violaciones flagrantes de la resolución 2231 (2015), así como de obligar al resto del mundo a ponerse del lado de su política de confrontación y fundamentalmente errónea.
En este contexto, cuento con su postura responsable y su prudencia para no ceder ante quienes actúan fuera del marco jurídico e intentan utilizar el Consejo de Seguridad y la Secretaría de las Naciones Unidas como instrumentos de represalia política contra el Irán. Espero que ni ustedes ni la Secretaría de las Naciones Unidas adopten ninguna medida práctica para restablecer el régimen de sanciones contra el Irán, ya que no existe ningún mandato para actuar en consecuencia. Cualquier acción en el sentido contrario constituiría una violación directa de la Carta de las Naciones Unidas, en particular de su Artículo 100.
La Secretaría no debe apoyar ningún intento de manipular el régimen mundial de no proliferación nuclear ni permitir que ningún Estado lo utilice para ajustar cuentas políticas con países “desfavorecidos”. Espero que se mantengan constantes en sus esfuerzos por evitar una situación tan negativa.
