
El Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) prepara un nuevo despliegue de armamento militar en el Mar Caribe para reforzar el Comando Sur y las operaciones contra Venezuela, en medio de una hostilidad contra el pueblo y Gobierno venezolanos.
“Por orden del presidente, el Departamento de Guerra está estableciendo una nueva Fuerza de Tarea Conjunta antinarcóticos en el área de responsabilidad del Comando Sur para aplastar a los cárteles, detener el veneno y mantener la seguridad de Estados Unidos”, refrió el secretario de Guerra, Pete Hegseth.
De igual manera, declaró que “el mensaje es claro: si trafican drogas hacia nuestras costas, los detendremos en seco”.

Asimismo el almirante Alvin Holsey, comandante del Comando Sur, refirió que “el crimen organizado transnacional amenaza la seguridad, la prosperidad y la salud de nuestro hemisferio”.
Holsey señaló que la JTF permitirá detectar, interrumpir y desmantelar redes de tráfico ilícito con mayor rapidez, en colaboración con homólogos estadounidenses y países socios.
Estas declaraciones son parte de la construcción del discurso «antidrogas» que ha desarrollado Estados Unidos para seguir invadiendo pueblos de América Latina.
Varios despliegues activos tiene EE.UU. sobre la región del Caribe y América del Sur
Este último se suma a la presión de Estados Unidos contra Venezuela, después de haber atacado a cinco embarcaciones civiles en el Mar Caribe, y de estar incitando a una guerra en la región.
Este viernes, el Gobierno de Venezuela denunció durante una sesión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una inminente amenaza de ataque militar por parte de Estados Unidos, tras el creciente despliegue de fuerzas navales y aéreas a escasas millas de sus costas.
El representante venezolano ante las Naciones Unidas, Samuel Moncada, detalló que la escalada consiste en la movilización ofensiva de más de 10.000 efectivos militares, aviones de combate, destructores misilísticos, cruceros lanzamisiles, tropas de asalto y un submarino nuclear.