La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pronunció un crucial discurso de política general ante un hemiciclo del Parlamento Europeo prácticamente vacío. Un video, ampliamente difundido en redes sociales, puso de manifiesto la llamativa ausencia de eurodiputados durante su intervención.
En su alocución, Von der Leyen esbozó las prioridades de la UE basándose en la última cumbre del Consejo Europeo, centrándose en dos ejes principales: el apoyo financiero continuado a Ucrania y una estrategia para impulsar la competitividad económica europea.
Entre los anuncios concretos, destaca el desembolso inmediato de un nuevo paquete de ayuda para Ucrania por valor de 6.000 millones de euros. Para garantizar la financiación del país en los próximos años, la presidenta presentó varias opciones, entre las que figura una polémica propuesta de un préstamo de reparación que utilizaría los beneficios generados por los activos congelados de Rusia.
Estas propuestas sobre Ucrania llegan en un momento de intenso debate dentro de la UE sobre la sostenibilidad a largo plazo de esta asistencia financiera y sobre las implicaciones legales que conlleva emplear los activos rusos incautados.
