En medio del aumento en las redadas y los ataques en varias ciudades de Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel, los asesinatos de palestinos inocentes a manos de soldados israelíes y colonos armados van en aumento, sin muestras de mediación de la ley israelí para castigar estas agresiones.
Según informó la cadena panárabe Al Mayadeen, esta jornada dos jóvenes palestinos fueron asesinados por soldados israelíes. Los uniformados sionistas justificaron el ataque con que habñian llevado a cabo un ataque con un coche en el que un soldado resultó herido, en la ciudad de Hebrón, al suroeste de Jerusalén. En tanto, un corresponsal confirmó que desde el amanecer las tropas sionistas atacan diversas zonas del norte de Cisjordania.
En esta misma jornada, el Ejército ocupante arrestó a cuatro jóvenes a la entrada del campamento de Al-Arroub, al norte de Hebrón. Esta antigua e importante ciudad ha sido especialmente atacada por los soldados en las últimas noches, quienes impusieron un toque de queda en cuatro barrios dentro de la Ciudad Vieja para asegurar una marcha de colonos.
Por su parte, The New Arab informó que durante la noche del viernes, un bebé palestino de 20 días sufrió asfixia tras inhalar gas lacrimógeno disparado por los soldados durante una incursión en la aldea de Madama, al sur de Nablus, que resultó en la hospitalización del infante. Después de asaltar la aldea y desplegarse en sus barrios, los sionistas dispararon granadas aturdidoras y gases lacrimógenos hacia las casas y negocios de los residentes.
El mismo medio informó que al amanecer de este sábado las tropas arrestaron a cuatro palestinos de la aldea de Nabi Saleh, en la gobernación de Ramallah, después de allanar y registrar sus casas. Asimismo, mantuvieron detenidos a un joven, a su esposa y a su hijo durante horas.
También el viernes en la noche fueron arrestados varios jóvenes de la localidad de Biddu, al noroeste de Jerusalén, tras disparar munición real y botes de gas tóxico, así como desplegar un gran número de efectivos.
Más allá de cifras de detenidos, las historias detrás de las redadas revelan que la violencia es una política central de Israel contra los palestinos en todos sus territorios ocupados, orientada a expulsarlos de los mismos, e incluyen el envenenamiento de sus tierras agrícolas, los ataques a sus plantaciones, el robo de estas, así como el robo y destrucción de las fuentes hídricas palestinas.
El pasado 4 de diciembre, en sus redes sociales, la periodista palestina Mariam Barghouti compartió el testimonio del joven Owais, quien fue secuestrado por milicias de colonos israelíes armadas por el Estado israelí a 15 km al oeste de Ramallah, y lo sometieron brutalmente a torturas y palizas. Las marcas de los golpes y cortes en su cuerpo son un testamento de la violencia colonialista de los atacantes.
OCHA: 227 palestinos fueron asesinados por el Ejército israelí y los colonos en 2025
La permisividad del robo colonialista en las leyes israelíes, y el amparo del Ejército a los colonos ha posibilitado un aumento en los asesinatos y la limpieza étnica de la población palestina. De acuerdo con un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), 227 palestinos han sido asesinados por el Ejército israelí o por colonos en Cisjordania ocupada del 1 de enero al 1 de diciembre. Cuatro de estos asesinatos se produjeron la semana pasada y la mayoría en las gobernaciones de Yenín y Nablus.
De acuerdo con el organismo de la ONU, precisamente en estas ciudades se han intensificado las redadas y la represión del Ejército durante el 2025, y han afectado directamente a al menos 95.000 palestinos. La agencia documentó, además, 1.680 ataques de colonos israelíes en más de 270 comunidades de todo el territorio palestino, con un promedio de cinco agresiones por día.
Esta política colonialista se extiende al sagrado cultivo de los olivos. OCHA documentó al menos 178 ataques entre octubre y noviembre en 88 comunidades. Por otra parte, comunidades enteras han sido completamente desplazadas o desalojadas por los colonos, quienes han dejado sin hogares y tierras a miles de personas.
En Cisjordania, la acción de los violencia de los colonos no enfrenta rendición de cuentas y cuenta con el respaldo del Ejército, que además le provee de armas y les permite apuntarlas contra la población indígena palestina.
Un caso icónico que refleja la impunidad de estos actos fue el asesinato del querido activista Odeh Hadalin en julio pasado. El colono Yinon Levi le disparó en los pulmones, lo cual quedó filmado en vídeo, y aún así, el homicida quedó libre tras unos pocos días de detención, mientras el Ejército mantenía el cuerpo del joven palestino retenido, para mayor evidencia de su deshumanización.
Mientras, en Gaza continúan los asesinatos y el «alto el fuego» pende de un hilo
Mientras este es el panorama en Cisjordania, el Ejército en Gaza continúa violando el alto el fuego y asesinando a palestinos a mansalva. Ocho personas fueron asesinadas en la franja en la jornada, incluidos una mujer y su hijo, quienes fueron alcanzados por disparos de los soldados en el barrio de Al-Zaytoun, al sureste de la Ciudad de Gaza, según informó WAFA. Los otros asesinados vivían en Beit Lahiya, Jabalia y el propio Al-Zaytoun.
Asimismo, fuentes locales informaron que el Ejército continúa sus operativos de demolición de casas, edificios y estructuras civiles palestinas en el barrio de Shujaiya, al este de la Ciudad de Gaza, como muestra de que los garantes de la tregua no hacen el trabajo de vigilancia al que están obligados, tanto de las acciones de la resistencia palestina como de los ataques israelíes.
Por otra parte, esta jornada el primer ministro catarí, jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, advirtió que el alto el fuego en Gaza ha alcanzado un «momento crítico» y corre el riesgo de colapsar si no avanza de inmediato hacia un acuerdo de paz permanente. Ello después de que la ONU aprobara lo que por muchos ha sido calificado como un plan de ocupación para la Franja de Gaza, salido de la Administración Trump, la misma que no ha reaccionado ante las violaciones israelíes a la tregua, y continúa enviando millonarias sumas de dinero en ayuda y armamento a su aliado Israel.
En el Foro de Doha, el primer ministro dijo que una tregua duradera requería la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza y la restauración de la estabilidad y la libertad de movimiento para los palestinos.
La advertencia pone de relieve la fragilidad del acuerdo mediado por Egipto, Catar, Turquía y Estados Unidos, que entró en vigor el 10 de octubre, así como el uso que ha hecho EE.UU. de este como una herramienta de distracción mientras permite que el Ejército ataque a civiles palestinos y lleve a cabo demoliciones de casas, para expulsar a los nativos de sus pueblos, ya arrasados por los bombardeos.
