Moskalkova refirió que hizo la solicitud directamente al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk.
«Es indignante que el reputado arqueólogo ruso Alexandr Butiaguin siga detenido en Varsovia. Espero una respuesta del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos», al que se ha dirigido para que facilite a su compatriota el restablecimiento de la justicia, escribió Moskalkova en su canal de Telegram.
Butiaguin, autor de numerosas publicaciones científicas, es secretario de la comisión arqueológica del famoso Museo del Hermitage, con sede en San Petersburgo, y jefe del sector de Arqueología Antigua de la Región Septentrional del Mar Negro. La policía ucraniana emitió una orden de búsqueda contra él en 2024.
Más temprano trascendió que el investigador, buscado por la justicia ucraniana en relación con excavaciones arqueológicas en el territorio de Crimea, fue arrestado en Polonia.
La cadena de radio polaca RMF FM reportó que el científico había estado impartiendo una serie de conferencias en Europa, y fue detenido la semana pasada por agentes de la Agencia de Seguridad Interior, durante una escala en Varsovia camino desde los Países Bajos a los Balcanes.
Ucrania, que se niega a reconocer la secesión de Crimea y su incorporación a Rusia en 2014, sostiene que Butiaguin y su equipo realizaron excavaciones no autorizadas en la antigua colonia griega de Mirmecio (Myrmekion), en el sureste de la península, y que estas actividades provocaron supuestamente la destrucción parcial del patrimonio cultural, un daño estimado en más de 200 millones de grivnas o unos 4,7 millones de dólares.
La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, tildó de absurdas las acusaciones contra Butiaguin.
