El Gobierno de Bolivia presentó este martes una nueva ley para el sector del litio y anunció una licitación internacional destinada a industrializar las vastas reservas del metal en los salares del sur del país, estimadas en 23 millones de toneladas.
“La ley del litio se divide en dos partes, la primera declara una parte del salar como patrimonio turístico para que en esa parte la gente siga viviendo del turismo”, refirió el ministro de Hidrocarburos y Energías, Mauricio Medinaceli.
En la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, Medinaceli también justificó el decreto 5503, que elimina los subsidios a los carburantes mientras exponía los parámetros a seguir en las licitación.
Entretanto, “el resto del salar quedará con un sistema de licitación internacional para adjudicarse a los privados o a Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) más el sector privado”, detalló el funcionario.
Bolivia, con sus 23 millones de toneladas de litio en el departamento de Potosí, forma parte del denominado Triángulo del Litio junto a Argentina (19 millones) y Chile (9 millones), que concentra las mayores reservas conocidas a nivel global.
El anuncio se produce en un momento en que el país tiene dos importantes contratos de producción de carbonato de litio pendientes de aprobación legislativa. Se trata de acuerdos firmados en 2024 con la empresa rusa Uranium One Group y con la china CBC, los cuales requieren el visto bueno del Congreso Nacional para su implementación.
El Gobierno está abriendo explícitamente la puerta a la inversión privada, ya sea en solitario o en alianza con la empresa estatal YLB.


