El presidente de Benín, Patrice Talon, aseguró en la noche del domingo que «la situación está completamente bajo control» tras el frustrado intento de golpe de Estado que sacudió al país de África occidental.
«Quisiera asegurarles que la situación está completamente bajo control y, por tanto, los invito a continuar con sus actividades pacíficamente esta noche. La seguridad y el orden público se mantendrán en todo el territorio nacional para garantizar la libertad de circulación de todo», afirmó el mandatario en un mensaje dirigido a la nación y al pueblo de Benín.
Durante su alocución, Patrice Talon explicó que un grupo reducido de soldados, con el pretexto de supuestas reivindicaciones, inició un alzamiento con el objetivo de atacar las instituciones del Estado y de desestabilizar al país, “cuestionando así el orden democrático».
Según Talon «semejante empresa habría sumido a nuestro país en una aventura condenada al fracaso con consecuencias desastrosas. Habría frenado el proceso de desarrollo iniciado gracias a los esfuerzos de todos sus hijos e hijas».
Más adelante el presidente elogió al Ejército y sus líderes que se mantuvieron leales a su Gobierno y pudieron frustrar la intentona golpista.
Al menos 13 militares que integraban el grupo de amotinados que irrumpió a primeras del domingo en la sede de la Oficina de Radio y Televisión de Benín (RTB) en Cotonú, capital del país, durante el intento de golpe de Estado fueron detenidos por el Ejército.
Los golpistas fueron reducido por la Guardia Republicana, que logró restablecer el orden en la sede de la televisión pública, según informaron medios locales.
Tras frustrarse el golpe, la Comisión de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) juntó con la Unión Africana condenó la intentona golpista, anunció que iba a enviar unidades de la Fuerza de Reserva a Benín para ayudarle a restablecer el orden en el territorio nacional.

La llamada Fuerza Regional estará compuesta por tropas provenientes de Costa de Marfil, Ghana, Nigeria y Sierra Leona.
Benín tiene previsto celebrar elecciones presidenciales en abril de 2026, en las que Talon no optará a la reelección, al agotar los dos mandatos de cinco años previstos por la Constitución.


