La entrega del Premio Nobel de Paz en su versión 2025 resultó ser un show mediático que terminó convirtiéndose en un bochornoso espectáculo contra el gobierno bolivariano de Venezuela, en donde el encargado de entregar el galardón terminó su discurso pidiendo la renuncia del presidente Nicolás Maduro y el sepelio del proceso de cambios sociales que en el país suramericano se adelanta bajo las banderas del chavismo.
Resulta paradójico que el discurso del presidente Trump contra el gobierno chavista de Nicolás Maduro coincida con el de los organizadores del Premio Nobel que, por igual, emularon en la condena a los cambios sociales en el país suramericano. Y mientras la hija de María Corina Machado recibía el premio y reproducía el discurso de su progenitora, el Comando Sur de los Estados Unidos disparaba misiles contra lanchas en el mar Caribe, por la sospecha de haber partido de las costas venezolanas. ¡Curiosa coincidencia!
Por esa y otras razones, el Nobel de este año no fue un premio de paz, fue un premio a la guerra. No solo por el carácter incendiario del discurso de quienes ofertaron el galardón. También por el pasado belicoso de las manos que lo recibieron.
Agenda golpista
La paz no es precisamente lo que caracteriza a la ultraderechista venezolana María Corina Machado. Su historial de violencia, desestabilización y terrorismo es amplio. Con Súmate, una organización financiada por Estados Unidos para promover la injerencia en el país, impulsó el caos y la desestabilización, como parte de la agenda del golpe de Estado de 2002 y la posterior intentona con el sabotaje a la producción petrolera durante 2002-2003.
Machado adquirió notoriedad en abril de 2002 cuando firmó el denominado ‘Decreto Carmona’, emitido durante el golpe de Estado contra el entonces presidente Hugo Chávez, derrotado por una masiva movilización popular y de militares leales a la Revolución Bolivariana. El ‘Decreto Carmona’ establecía la disolución de todos los poderes públicos del país. Fuentes estatales la señalan como partícipe de los eventos que en aquel momento interrumpieron el orden constitucional.
Por su actuación en estos hechos, se inició un proceso penal por el delito de traición a la patria. Fue condenada a 28 años de prisión, aunque posteriormente recibió una medida de amnistía por el gobierno del presidente Chávez. El 31 de mayo de 2005 fue recibida en la Oficina Oval de la Casa Blanca por el presidente George W. Bush. La reunión duró más de cincuenta minutos. Medios estatales registraron la conversación como un hecho políticamente significativo, al producirse en el contexto de fuertes tensiones entre Caracas y Washington.
Espiral de violencia
Machado es conocida por promover acciones terroristas. Junto a Leopoldo López organizó un plan llamado “La salida”, que en 2014 dejó decenas de muertos en el país. Fomentó una espiral de violencia callejera conocida en Venezuela como ‘guarimbas’, en las que murieron decenas de personas inocentes. Una de ellas fue quemada viva por grupos de choque alentados por sus mensajes de odio.
Desde antaño ha sido promotora de una intervención militar extranjera en Venezuela, no solo en la actual coyuntura de despliegue de buques de guerra en el mar Caribe, sino desde siempre en su actividad pública.
Mientras se desempeñó como diputada, en 2014 usurpó un puesto en la delegación de Panamá a la Organización de Estados Americanos, OEA y rogó a esa instancia la aplicación de la ‘Carta Democrática’ en contra del país bolivariano, con el fin de justificar la intervención armada extranjera en Venezuela.
En 2019, llamó a que una fuerza militar ‘de paz’ acompañara la invasión por Cúcuta, promovida por Juan Guaidó ese año. Se hizo público con notoriedad el deseo de ella: “Comunidad internacional, no basta con el apoyo de llevar ayuda. Tienen que entrar”, dijo en ese momento.
Petardos contra la economía
En 2015 fue una de las principales figuras que solicitó públicamente ‘sanciones’, que han sido verdaderos petardos contra la economía de Venezuela y han afectado la inversión de recursos en salud, estabilidad y bienestar social de la población.
Las medidas coercitivas unilaterales que ha solicitado Machado provocaron una migración económica inducida de miles de venezolanos. Esta situación ha sido utilizada por María Corina para manipular a los migrantes prometiéndoles que regresarán al país, sin mencionar que la causa de la migración económica está directamente relacionada con el efecto de las sanciones que ella misma ha pedido en reiteradas ocasiones a Estados Unidos. Además, apoya la política de Donald Trump de persecución a la población migrante.
Seguirán fracasando
La vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez criticó la entrega del Nobel de la Paz a María Corina Machado y lo definió como un ‘premio manchado de sangre’. La funcionaria dijo que la ceremonia en Oslo, Noruega, para la entrega del galardón a la ultraderechista Machado ha sido un mero show.
“Fíjense lo que pasó en Noruega. Asistieron a un velorio, un fracaso total. El show fracasó. La señora Machado no se presentó, dicen que por miedo, porque en Noruega se alzó el pueblo, salió la gente a protestar en las calles por lo que era un premio manchado en sangre”, aseguró Rodríguez.
Indicó además la vicepresidenta, que quienes se congregaron en ese premio son los que han levantado la mano a favor del genocidio contra el pueblo palestino. “Fracasaron y seguirán fracasando”, remarcó la dirigente política.
