Al menos 280 mil personas dejaron sus casas para escapar de la violencia en la parte occidental de Mosul, donde el ejército iraquí libra una ofensiva para expulsar al Estado Islámico (EI), señaló hoy Naciones Unidas.
Después de liberar la parte oriental de la urbe, a mediados de enero, el gobierno iraquí con el apoyo de milicias y de la aviación extranjera reanudó el 19 de febrero las operaciones militares para desalojar a los fundamentalistas de la zona oeste, las que siguen su curso en medio de cruentos combates.
Según la ONU, más de 300 mil civiles han abandonado Mosul desde que en octubre pasado comenzó la ofensiva para derrotar al EI, que ocupó la ciudad en 2014.
Aunque muchas personas han regresado a sus hogares en los barrios del lado oriental del río Tigris, el rápido incremento de los desplazados en la parte occidental obliga a la ONU, las agencias humanitarias y las autoridades locales a levantar nuevos refugios de emergencia, dijo aquí a la prensa el portavoz Stephane Dujarric.
El vocero precisó que se espera la apertura mañana de un nuevo campamento para desplazados en el sur de Mosul.
Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos y el gobierno de Iraq advirtieron hoy en un reporte que más de la mitad de los habitantes del país árabe están en riesgo de inseguridad alimentaria.
En ese sentido, insistieron en que la población no podría soportar un empeoramiento de la situación.
Después de liberar la parte oriental de la urbe, a mediados de enero, el gobierno iraquí con el apoyo de milicias y de la aviación extranjera reanudó el 19 de febrero las operaciones militares para desalojar a los fundamentalistas de la zona oeste, las que siguen su curso en medio de cruentos combates.
Según la ONU, más de 300 mil civiles han abandonado Mosul desde que en octubre pasado comenzó la ofensiva para derrotar al EI, que ocupó la ciudad en 2014.
Aunque muchas personas han regresado a sus hogares en los barrios del lado oriental del río Tigris, el rápido incremento de los desplazados en la parte occidental obliga a la ONU, las agencias humanitarias y las autoridades locales a levantar nuevos refugios de emergencia, dijo aquí a la prensa el portavoz Stephane Dujarric.
El vocero precisó que se espera la apertura mañana de un nuevo campamento para desplazados en el sur de Mosul.
Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos y el gobierno de Iraq advirtieron hoy en un reporte que más de la mitad de los habitantes del país árabe están en riesgo de inseguridad alimentaria.
En ese sentido, insistieron en que la población no podría soportar un empeoramiento de la situación.