‘Saquen sus narices de Venezuela’, clamó el presidente venezolano, Nicolás Maduro, en repudio de recientes comentarios del vicepresidente de EE.UU., Mike Pence.
Pence, en declaraciones formuladas en la ciudad estadounidense de Miami, dijo que Venezuela era un buen ejemplo de lo que sucede cuando la democracia se debilita e instó a los otros Estados de la región a condenar el «abuso de poder» del Gobierno de Maduro.
«Es un manual (de EE.UU.) que ha fracasado en Venezuela y yo le digo saquen sus narices de Venezuela, volvieron a fracasar en Venezuela, en Venezuela no va haber intervención, en Venezuela lo que viene es paz, diálogo y Constituyente«, aseveró el jefe de Estado venezolano.
Para Maduro Venezuela es el objetivo central del imperialismo de Estados Unidos, que busca retomar el poder hegemónico en América Latina y cree que tiene el derecho de injerir en los asuntos internos de otros países y dar órdenes.
Desde abril, Venezuela vive un ambiente muy tenso debido a las marchas callejeras violentas que promueve la oposición para derrocar el Gobierno de Maduro. Según fuentes locales, en estos dos últimos meses se han registrado más de 70 muertes y cientos de heridos y detenidos relacionados con las movilizaciones de la derecha.
Los opositores prefieren protagonizar actos vandálicos incluso muchos con saldos mortales en las calles mientras se niegan a escuchar los llamados del Gobierno chavista para sentarse a la mesa del diálogo.
Maduro acusa a Washington de patrocinar a los opositores venezolanos para desestabilizar el país con el fin de intervenir y apoderarse de los recursos naturales del país bolivariano.
La palabras de Pence también recibieron el rotundo rechazo de la canciller venezolana Delcy Rodríguez, quien propuso al vicepresidente norteamericano que antes de atacar la democracia de Venezuela revise que en EE.UU. «no se respeta ni gobierna la voluntad popular».
