El Gobierno sirio presidido por el presidente Bashar al-Asad, por medio de la agencia estatal SANA, ha denunciado el ataque aéreo israelí efectuado este sábado en los altos de Golán sirio y ha asegurado que dicho bombardeo ha dejado un gran número de civiles muertos, contrario a lo que alega el régimen de Israel, que además ha publicado el presunto vídeo de su ataque.
En la jornada de hoy el régimen de Tel Aviv efectuó un ataque aéreo en el territorio sirio en la provincia de Al-Quneitra (suroeste) bajo la excusa de que se habían lanzado una decena de proyectiles desde el territorio sirio al lado ocupado de los altos de Golán, algo que niegan fuentes militares del Ejército sirio.
La versión israelí de los eventos insiste en que el bombardeo se llevó a cabo sobre dos tanques y posiciones militares del Ejército sirio y sus aliados que habían lanzado los cohetes hacia los territorios ocupados.
No obstante, SANA confirma que el ataque israelí ha alcanzado un edificio residencial y un aparcamiento en la ciudad de Al-Baaz, donde previamente los militares sirios libraban batalla frente a los integrantes del Frente Fath Al-Sham (antiguamente conocido como el Frente Al-Nusra).
De hecho, el Gobierno sirio ha acusado al régimen de Israel de usar su ataque para dar cobertura aérea a los terroristas del Frente Fath Al-Sham y de facilitarles avances durante los enfrentamientos de los extremistas con las fuerzas sirias.
Desde la aparición del terrorismo en Siria, el régimen de Tel Aviv, denunciado por Siria como uno de los patrocinadores de ese flagelo en el Oriente Medio, no ha escatimado esfuerzos para allanar el camino del derrocamiento del presidente Bashar al-Asad.
Con tal fin ha recurrido a un gran número de estrategias, por ejemplo: armar a los terroristas y atenderlos en sus hospitales.