Más de medio millón de personas han desbordado las calles de Barcelona para rechazar el terrorismo.
Los servicios de emergencia y cuerpos de seguridad han encabezado la manifestación unitaria, mientras gran parte de la ciudadanía ha rechazado la presencia del rey Felipe VI y el Gobierno de España.
Grito unánime y masivo contra el terror. “No tinc por”, “no tengo miedo”. Con este lema, medio millón de personas se ha lanzado a la calle para plantar cara al terrorismo, rechazar los atentados de las Ramblas y Cambrils y mostrar solidaridad con las víctimas, en una nueva manifestación histórica en Barcelona a favor de la paz.
La manifestación ha sido encabezada por representantes de los cuerpos de seguridad y emergencias, entidades vecinales y religiosas y ha contado con la presencia de todos los partidos políticos sin excepción y todas las instituciones del Estado, incluido el rey Felipe VI.
La marcha ha exhibido cierta unidad, aunque las distancias ideológicas y el proceso independentista se han hecho hueco. El rey ha llegado entre sonoras pitadas de miles de personas que también denuncian sus lazos con monarquías del Golfo Pérsico, acusadas de financiar el terrorismo.
A la misma hora de la manifestación en Barcelona, miles de personas también se han concentrado en Ripoll, la población de origen de la mayor parte de los presuntos terroristas, para condenar los atentados y fomentar la cohesión social.
Estas muestras masivas de repulsa y acompañamiento del dolor, han servido para cerrar una semana de luto de la sociedad catalana, que aún se pregunta qué puede y debe hacer para evitar nuevos capítulos como éste.
Oriol Puig, Barcelona.
