El georgiano Alexander Revazishvilli recuerda la trágica fecha del 20 de febrero de 2014 en Kiev, cuando un grupo de misteriosos francotiradores abrió fuego contra la multitud y asesinaron, entre civiles y policías, a más de 80 personas.
Confesiones de Revazishvilli y otros dos georgianos en el documental «Ucrania, la verdad oculta» que se emitió por Canal 5 (Italia) revela una verdad diferente: la verdad de una masacre de la que fueron acusados Yanukovich y sus aliados rusos.
Revazishvilli y sus dos compañeros, conocidos y entrevistados en el documental, eran por este orden, un ex miembro de los servicios de seguridad del ex presidente georgiano Mikhail Saakashvili y dos ex militantes de su propio partido. Fueronn instruidos para intervenir- junto con otros voluntarios de Georgia y Lituania – en las manifestaciones que tuvieron lugar en Kiev, a cambio de cinco mil dólares cada uno. El 18 de febrero líderes de la oposición ucraniana distribuyó armas a grupos de georgianos y lituanos.
«Había tres o cuatro armas en cada bolsa, había Makarov, AKM, rifles y munición». Al día siguiente, los líderes de la protesta explicaron a los voluntarios que enfrentarían un asalto policial en el edificio del Conservatorio. «Debíamos disparar hacia la plaza y sembrar el caos. Uno de los protagonistas confiesa haber recibido otras instrucciones mucho más explícitas.»Pregunté: tenemos que comenzar a disparar ¿pero contra quién? Respondieron que contra quién era lo de menos, que había que disparar para sembrar el caos».
«No importaba si disparábamos contra un árbol, una barricada o donde fuera» confirma otro voluntario, «lo que contaba era sembrar la confusión».
Confiesa Alexander: «Hubo muertos y heridos. Mi único pensamiento era terminar aquello, antes de que alguien me retuviera pues de ser así me lincharían».
Alexander y sus dos compañeros aún no han recibido la menor recompensa y decidieron decir la verdad sobre quién los usó y dejaron abandonados. «En aquel momento no me di cuenta, no estaba preparado, posteriomente lo entendí. Fuimos utilizados»
Si mataron a algún nazi, nos hicieron un favor.