8 locales comerciales resultaron con daños a la infraestructura, mientras que un furgón y una torre de telecomunicaciones del Instituto Costarricense de Electricidad fueron incendiados.
La policía abordó un autobús con pasajeros y varios manifestantes respondieron lanzando un cóctel “molotov” contra un furgón policial, que resultó quemado.
Una patrulla de la policía de Cieneguita, en Limón, también fue alcanzada por otro cóctel “molotov” lanzado por personas que la policía no ha logrado identificar, aunque ha detenido a dos personas; a una la acusan de robo y a otra de conducción temeraria.
El miércoles el gobierno denunció que un grupo de trabajadores provocó disturbios y saquearon un supermercado en la ciudad de Limón (Caribe) y la policía detuvo a 16 personas.
El martes los piquetes de manifestantes se apostaron en la entrada de los puertos y de la refinadora para intentar paralizar las operaciones.
El miércoles por la noche la policía entró en la universidad de San José persiguiendo a cientos de estudiantes que habían bloqueado una calle, detuvo a cuatro se ellos y golpearon a otro.
Ayer la fiscalía inició los trámites judiciales para declarar la ilegalidad de la huelga general. Los enfrentamientos han llegado a tal punto que un obispo la ha calificado como “moralmente inaceptable”.
Los sindicatos rechazan la reforma tributaria porque afecta en mayor medida a la clase obrera, y particularmente a los trabajadores de las instituciones públicas, debido a que contiene reducciones en pluses salariales para contener el gasto.