Brasilia, 26 nov (PL) Con la retirada de los profesionales cubanos del programa Más Médicos, unos 30 millones de brasileños se quedarán sin asistencia médica primaria, alertó hoy el exministro de Salud Arthur Chioro.
‘Sin ironías, yo rezo mucho que los médicos brasileños ocupen las plazas en el nuevo llamado, en caso contrario, tendremos desasistencia y muerte’, dijo a TV 247 el extitular de Salud en el Gobierno de Dilma Rousseff (2011-2016).
El ejecutor de Más Médico reconoció que existen dificultades para emplear a médicos en las regiones más periféricas y distantes de Brasil, lo cual genera una situación de extrema inequidad.
‘Cuando elaboramos Más Médicos, como política de Estado, colocamos el dedo en la herida en la cuestión de provisión de médicos, que históricamente fue regulada por las corporaciones’, reveló el profesor de la Universidad Federal de Sao Paulo.
Los ministerios de Educación y Salud comenzaron a pensar en un proyecto de país para atender las demandas sociales, pormenorizó Chioro, al denunciar el corporativismo presente en algunas categorías médicas.
Indicó que ‘en nombre de la reserva de mercado se llegó a formar apenas dos neurocirujanos por año en el estado de Río de Janeiro’.
El exministro recordó que en 2003, cuando Brasil disfrutaba el pleno empleo, el Gobierno de Dilma abrió una convocatoria para el programa Más Médicos ‘con prioridad para los médicos brasileños y luego se le ofreció a los de otras procedencias’.
Solo después de ese proceso, precisó, ‘las vacantes estaban disponibles para los profesionales de otras nacionalidades, en el caso, también para los médicos cubanos’.
Mientras los profesionales de la isla ocupaban sus puestos en rincones y regiones vulnerables de Brasil de forma paliativa como estableció el programa, el Gobierno de Dilma invirtió en la expansión de matrículas en los cursos de medicina, para que los futuros profesionales brasileños ocuparan las plazas de los extranjeros, en los próximos años.
Chioro rememoró que ‘cuando se presentó, el programa garantizó de forma emergente 18 mil 268 médicos, esparcidos por todo el país, que pudieron prestar atención básica a 60 millones de brasileños. Era gente pobre siendo atendida como nunca’, acentúo.
Tras cinco años de cooperación, Cuba decidió a mediados de este mes no continuar en Más Médicos luego de los cuestionamientos y manifestaciones ofensivas del presidente electo Jair Bolsonaro sobre la permanencia de los profesionales de la isla.
Para el académico, la prioridad del futuro gobierno brasileño en el área sanitaria será el servicio privado para beneficiar a los tiburones de los programas de salud.
‘Con el mantenimiento de la PEC 95 (Propuesta de Enmienda a la Constitución), que congela los gastos públicos en un período de 20 años, sumado a la no continuación de los galenos cubanos (en Más Médicos), el resultado será la total desasistencia y muerte’, subrayó Chioro.