A pesar de las amenazas de sanciones de Estados Unidos, Turquía vuelve a insistir en que recibirá los sistemas antiaéreos S-400 de Rusia
“Ya hemos cerrado este acuerdo y compraremos los S-400 a Rusia sin ninguna duda”, declaró el sábado el ministro turco de Asuntos Exteriores, Mevlut Cavusoglu.
En declaraciones ofrecidas a los periodistas al margen de la cumbre del G20 (Grupo de los Veinte países industrializados y emergentes del mundo) en Buenos Aires (capital argentina), Cavusoglu puso de relieve que Turquía decidió comprar los sistemas S-400 rusos porque fue la mejor oferta posible cuando Ankara tenía la necesidad urgente de fortalecer su defensa.
Durante los últimos diez años, Turquía intentó adquirir los sistemas antimisiles estadounidenses Patriot, recordó el canciller turco; no obstante, indicó, la última carta al respecto enviada a EE.UU. hace más de un año y medio “quedó sin respuesta alguna”.
En cambio, “Rusia nos propuso la mejor oferta posible en aquellas condiciones”, resaltó el jefe de la Diplomacia turca, antes de agregar que Turquía estudiará “quién hará la mejor propuesta en el futuro”.
De acuerdo con un acuerdo suscrito a finales de 2017, Ankara se comprometió a comprar a Moscú dos sistemas S-400 por valor de unos 2500 millones de dólares: la primera entrega está prevista para marzo de 2020.
Por su parte, el Departamento estadounidense de Estado ha amenazado ya en reiteradas ocasiones a Turquía con imponerle sanciones y detener la entrega de cazas F-35 si compra a Rusia sistemas de defensa antiaérea S-400.
A finales del pasado agosto, Alexánder Mijéyev, director general de la principal agencia estatal rusa para la exportación e importación de productos relacionados con la defensa, Rosoboronexport, informó de que la compañía comenzará a suministrar los sistemas antiaéreos a Ankara en 2019.
