Desacuerdos entre España y otros países de Europa retrasan la implementación del canal de pagos de la UE para el comercio con Irán, ante las sanciones de EE.UU.
Según ha informado este lunes la agencia española Europa Press, el mecanismo financiero, llamado Entidad con Cometido Especial (SPV, por sus siglas en inglés), tenía que entrar en vigor este lunes, pero España no lo ha permitido debido a sus fuertes críticas a algunos detalles del texto que la Unión Europea (UE) pretendía publicar luego de aprobarlo, tal como había prometido hace meses a Teherán, tras la salida de EE.UU. del pacto nuclear y la reimposición de sanciones contra el país persa.
Madrid, en específico, ha protestado que, en la declaración, se reconozca expresamente los esfuerzos de Alemania, Francia, el Reino Unido e Italia en los diálogos con Irán sobre su programa de energía nuclear y pide que en lugar de mencionar a estos cuatro países como “el formato E4” se use el término “varios países europeos”.
Italia, por su parte, ha rechazado la propuesta española de reconocer los esfuerzos de “varios países de la Unión Europea”, según han comunicado a Europa Press fuentes diplomáticas. “España tenía temor a que se creara un precedente sobre un formato que nadie ha aprobado”, dice la agencia, que cita otras fuentes.
Sobre este asunto se ha pronunciado también el ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Heiko Maas, quien ha asegurado que, en los próximos días, se inaugurará de manera oficial el mecanismo SPV y ha expresado cierto enfado de que las diferencias entre Italia y España no se hayan podido resolver a tiempo en la reunión de los representantes de los Veintiocho.
La iniciativa europea consiste en el establecimiento de un canal específico para facilitar los pagos vinculados a las exportaciones (incluido el petróleo) e importaciones iraníes. De entrar en vigor, puede ayudar a las empresas europeas a comerciar con Irán sin sufrir las sanciones antiraníes, reimpuestas en los últimos meses por Estados Unidos.
Teherán, que ha cumplido a carta cabal lo dispuesto en el acuerdo nuclear, también conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), ha solicitado a sus socios europeos que respeten de igual modo sus compromisos, en particular en materia económica, y actúen de manera independiente ante las presiones de EE.UU.
