Lorena Guevara Silva.— Durante el 2018, en el país se fomentaron nuevas áreas de bosque en 26 165,8 hectáreas, por los métodos de plantación y manejo de la regeneración natural; de ellas, el 69% con fines de protección y conservación. Además, se pusieron en práctica medidas de protección contra incendios forestales en 41 778, 1 kilómetros, destacó Antonio Guzmán Torres, jefe del Departamento de Fomento, Manejo Forestal, Áreas Protegidas y Fauna Silvestre, del Grupo Empresarial Agroforestal (GEA).
Con respecto a las proyecciones hasta el 2030, Guzmán Torres añadió que deben «tecnificar los procesos de la silvicultura y reconocer a los árboles como un componente necesario en los sistemas agropecuarios por sus aportes a la dinámica de los agro-ecosistemas, la protección al suelo y los cultivos, el mejoramiento de las condiciones climáticas y su contribución a la alimentación».
La Dirección Forestal y Fibras Naturales se propone alcanzar una producción de madera aserrada de 270 000 metros cúbicos anualmente, 5 000 metros cúbicos de tableros y 5 000 toneladas de resina. También están entre sus objetivos la administración y desarrollo de 34 áreas protegidas con una superficie total de 97 554 hectáreas bajo la asesoría y guía del Centro Nacional de Áreas Protegidas, aseveró Wilfredo Arregui Valdés, director forestal del GEA.
Este 21 de junio se celebrará del Día del Trabajador Forestal; la Empresa Agroforestal de La Habana será sede de la clausura de la jornada, entre otras razones, por su destacada participación en la comercialización de leña combustible, cujes para el tabaco y carbón vegetal.
Entre las actividades por la fecha destacan la intensificación del trabajo de profilaxis en los bosques con vista a reducir al mínimo los incendios forestales a través de actividades de protección, el desarrollo de labores de arborización y la implementación del plan de estado para enfrentar el cambio climático.