Georgia Clark saltó a la fama de ser la maestra blanca más racista de EE.UU. Sus desafortunados mensajes en las redes sociales la delataron, y esto ocurrió en el estado de Texas.
La maestra de secundaria pensaba que estaba enviando mensaje privados al presidente estadounidense, Donald Trump, y eran públicos. Le pidió que deportara a estudiantes indocumentados.
El profesor Salvador Chamba Jiménez en California aseguró que esta actitud no debe tolerarse en un docente. También dijo que el distrito escolar de Fort Worth Texas hizo lo correcto al despedir a esta maestra.
El antropólogo Juan Gamarra publicó en el portal de Internet “la república” que discriminar como insulto el color de la piel o cualquier otro rasgo de las personas, quienes lo hacen demuestran inseguridad desde el punto de vista psicológico y social.
Una vez que los tuits salieron a la luz, también lo hicieron otras acusaciones, dijo el superintendente Kent Scribner después de la reunión de la junta escolar. Ahora la profesora Clark tiene quince días para apelar su despido a la agencia de educación del estado de Texas.
Rosie Orbach, Los Ángeles.
