Irán se mantiene firme en su decisión. Ya lo había anunciado antes; dejará de cumplir parte del acuerdo nuclear hasta que los signatarios europeos sienten la cabeza y cumplan con sus compromisos abandonados hasta hoy.
Teherán ya ha dado los primeros pasos. Sin embargo, los europeos prefieren más las palabras que las acciones. Tanto es así que este jueves la UE pidió a Irán evitar más medidas que minen el acuerdo nuclear, y que revierta su decisión de aumentar sus reservas de uranio enriquecido, por encima del límite de los 300 kilogramos, contemplado en el pacto nuclear con las potencias mundiales en 2015.
Por su parte, la Cancillería rusa lamentó la medida de Irán, sin embargo dijo que hay que tomar la medida como una consecuencia natural de todos los eventos que lo precedieron. En este sentido, acusó a EE.UU. de provocar que Irán haya superado el límite de uranio poco enriquecido.
Todo esto un día después de que el presidente de Irán, Hasan Rohani, anunciara que su país volverá a enriquecer uranio por encima del 3,67 por ciento, el próximo 7 de julio, y hará que el reactor nuclear de Arak realice sus actividades anteriores. No obstante, no cerró todas las puertas.
A su vez, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, enfatizó que los signatarios europeos deben cumplir los 11 compromisos aceptados en virtud del mismo, que no incluyen el mecanismo Instex (acrónimo en inglés de Instrumento de Apoyo a Intercambios Comerciales), lanzado por Europa para poder comerciar con Irán.
