A nivel de todo el Estado español escenifican marcados desencuentros, pero, en realidad, ambas formaciones se asemejan bastante. Las dos trabajan para el gran capital, son ranciamente unionistas y tienen entre sus filas a no pocos individuos e individuas que son unos auténticos fascistas.
Prueba de que no son tan diferentes es que los “socialistas” del PSOE y los neofalangistas de Ciudadanos han cerrado un acuerdo de gobierno para gobernar durante cuatro años en el consistorio de la almeriense localidad de Huércal-Overa.
A través de un comunicado, el PSOE ha informado que el acuerdo se centrará «en llevar a cabo un proyecto transformador del municipio y en mejorar la calidad de vida de los huercalenses». Y añaden que pretende “generar la estabilidad necesaria” para hacer posible los principales compromisos electorales de ambos partidos (una incongruencia total si en verdad fueran dos partidos tan diferentes).
Para que luego nos digan desde supuestas posiciones de izquierdas que el PSOE también lo es. No se lo creen ni ellos.