Un grupo de astrónomos estadounidense presume haber descubierto una nueva clase de estrellas pulsantes. Muchas de sus propiedades coinciden con las de las ‘subenanas’ tipo B, descubiertas hace apenas dos años, pero la naturaleza pulsante de estos cuerpos celestes las hace diferentes.
El equipo, encabezado por Thomas Kupfer, del Instituto de Física Teórica de la Universidad de California en Santa Bárbara, identificó en la Vía Láctea cuatro candidatos a esta nueva categoría. Todos estos objetos son de color azul, pulsan con amplitudes mayores al 5 % y tienen períodos de pulsación comprendidos entre 200 y 475 segundos.
El hallazgo fue una sorpresa para el propio equipo, afirma el sitio web universitario este 1 de agosto. Inicialmente, Kupfer y sus colegas estaban buscando estrellas binarias por medio de un telescopio y una cámara instalados en el observatorio Palomar (también en California).
Un pulso muy rápido
La luz proveniente de los sistemas binarios también llega a la Tierra de forma pulsada, pero esto se debe a algún eclipse periódico. Sin embargo, los eclipses no pueden explicar los rápidos cambios en el brillo de los cuatro astros recién descubiertos. Los investigadores estiman que estos se deban posiblemente a significativas variaciones en la velocidad radial que caracteriza a los movimientos de un cuerpo celeste que orbita a otro.
“Muchas estrellas pulsan, incluso nuestro Sol lo hace en una escala muy pequeña”, comenta Kupfer, en referencia al ciclo solar de 11 años con un variación del brillo del 0,1 %. “Aquellas con mayores cambios de brillo son generalmente pulsantes radiales, que ‘respiran’ a medida que la estrella cambia de tamaño“.
“Estas estrellas ciertamente han completado la fusión de todo el hidrógeno de su núcleo en helio”, señala Lars Bildsten, otro miembro del equipo investigador, para explicar “por qué son tan pequeñas y pueden oscilar tan rápido”.
Diferencia en la fusión de helio
Una ‘subenana’ es una estrella que tiene un diámetro aproximadamente diez veces menor que el Sol y una masa de entre el 20 y el 50 % de la masa solar. No obstante, son increíblemente calientes, hasta los 50.000º Celsius, mientras que las temperaturas en la superficie del Sol rondan unos 5.500º C.
El artículo, publicado en The Astrophysical Journal Letters en pasado junio, apunta a la acumulación de hierro en este nuevo grupo de estrellas como la probable causa de su pulsación. Asimismo, señala que detrás de su radiación inestable puede estar un mecanismo relacionado con la presencia metálica en algunas capas de estos astros.
En general, se estima que las estrellas ‘subenanas’ tipo B fusionan helio en su núcleo o en el cascarón que lo rodea. Sin embargo, los investigadores creen que las ‘subenanas’ pulsantes perdieron su material externo antes de que ese helio estuviera lo suficientemente caliente y denso para la fusión.