El embajador ruso en Estados Unidos, Anatoli Antónov, ha anunciado este miércoles que Moscú “está preparado” para extender a EE.UU. la ayuda que ofreció a varios países en Europa y Asia para contrarrestar al nuevo coronavirus 2019 (COVID-19).
En un mensaje dejado en la página de la embajada rusa en Facebook, Antónov se ha referido, en concreto, a los kits de diagnóstico “de calidad”, que envió a China, Irán e Italia, países más azotados por el temible virus.
“Nuestros kits de diagnóstico han demostrado su alta calidad en China e Irán, han sido enviados a Italia (…) Si fuese necesario, Rusia estaría lista para ayudar también a EE.UU., al que ha ofrecido más de una vez la asistencia para apagar los incendios en California”, ha afirmado el jefe de la misión diplomática en EE.UU.
Antónov ha aprovechado la ocasión para expresar también su “preocupación” por “informes falsos” que siguen difundiendo algunos medios estadounidenses sobre “una inquietud” que circula entre las autoridades rusas en la lucha que mantiene contra el COVID-19.
Ha afirmado que estos medios intentan “desviar la atención pública de la complicada situación” que atraviesan ciertos países como EE.UU.
Rusia es blanco de las sanciones de la Unión Europea (EU) y EE.UU., contra los cuales ejerce sanciones simétricas, no obstante, ante la grave situación creada por la rápida propagación del COVID-19, ha decidido contribuir a la lucha contra la pandemia, dado que la permanencia del virus en un solo país, amenaza a toda la humanidad.
En cuanto a una avalancha de ayuda médica a Italia, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha despejado las dudas sobre intentos del Kremlin para ganar el apoyo de Italia ante las sanciones impuestas en su contra por el bloque comunitario y ha asegurado que la ayuda es “incondicional” y que Rusia no espera nada a cambio, ni un alivio de sanciones.
