Barricadas, centros comerciales saqueados, disturbios, incendios… El domingo en Montreal, Canadá, la manifestación de protesta por la muerte de George Floyd acabó en intensos enfrentamientos con la policía que se prolongaron durante unas tres horas.
Unos 10.000 manifestantes recorrieron el centro de la ciudad en un ambiente tranquilo, pero a primera hora de la tarde la policía dio orden de dispersarse y estalló una ola violencia sin precedentes.
Los manifestantes arrojaron proyectiles contra la policía, que respondió con gases lacrimógenos.
Varios escaparates fueron saqueados y la calma pareció volver al centro de Montreal al final de la noche. Los negocios no pudieron reabrir hasta principios de la semana pasada en Montreal a causa de la cuarentena.
La policía no ha indicado cuántas personas han detenido.
La mayoría de los manifestantes de Montreal llevaban máscaras, pero durante el desfile por las calles de la ciudad o el mitin en la plaza principal, no respetaron la distancia física recomendada por el gobierno.
Numerosos carteles proclamaban “Las vidas de los negros son importantes”, “Sin justicia no hay paz” o “No puedo respirar”, en referencia a las últimas palabras pronunciadas por George Floyd cuando fue asesinado por tres policías.
La policía de Montreal se enfrentó públicamente a sus colegas de Estados Unidos, criticando el asesnado de Floyd.
