El expresidente del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero cree que hay gobiernos que se arrepienten de haber reconocido al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela allá a principios de 2019.
“No sé si lo dirán en público, pero esa reflexión está presente”, ha dicho Zapatero durante una entrevista con la emisora argentina Radio La Pizarra.
Sus declaraciones se fundamentan en la decepción mundial que ha creado Guaidó, cuyo liderazgo se ha visto ensombrecido tras su participación en la fallida Operación Gedeón, destinada a atentar contra la vida del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El político español ha destacado que, ahora, se impone el “silencio” que, en su opinión, equivale a “bajar la cabeza” de quienes se equivocaron apoyando a Guaidó, y ha hecho referencia a las recientes declaraciones del presidente de EE.UU., Donald Trump, sobre su disposición a hablar con Maduro.
“Hemos visto las declaraciones del mismo Trump que luego han querido corregir. No vamos a ir más lejos”, ha agregado.
En otra parte de sus declaraciones, Zapatero ha destacado que el diálogo entre el Gobierno y la oposición de Venezuela le dará una mayor estabilidad al país y resurgirá con fuerza, una vez que se esclarezca el panorama político en la nación suramericana. En ese sentido, ha reprochado el “tiempo” que se les ha quitado a los venezolanos reforzando “a una parte” a través de la comunidad internacional, en lugar de impulsar un auténtico proceso de diálogo.
“Venezuela es un país que en el momento en el que le demos oxígeno político, económico y social, resurgirá con fuerza. Tiene un gran potencial. Calidad humana. Volverá mucha gente”, ha subrayado el exmandatario.
Zapatero también ha valorado la indeclinable voluntad del pueblo venezolano para mantener la paz, que, a pesar de los conflictos, de las injerencias, de los mensajes desde fuera, no ha querido enfrentarse. “Han querido mantener la paz”, ha precisado.
Desde 2016, Zapatero ejerció una labor como mediación que se concretó en la liberación de algunos presos políticos, pero que terminó fracasando en 2018 porque la mayoría de la oposición percibía al español como una figura demasiado escorada hacia el Gobierno de Maduro.
