El nuevo enviado especial del Reino Unido para Siria, Jonathan Hargreaves, publicó el lunes un mensaje en Twitter, donde acusó al Gobierno de Damasco de violar los derechos humanos de los sirios y dijo que Londres “hará todo lo posible para que el presidente sirio, Bashar al-Asad, rinda cuentas”.
La Cancillería siria ha expresado este martes su extrañeza por las “hipócritas” afirmaciones de Hargreaves, señalando que el Reino Unido promueve el terrorismo, el cual supone la “razón principal” del sufrimiento del pueblo del país árabe.
“El responsable británico ignoró que la razón principal del sufrimiento actual de los sirios radica en la agresión terrorista que derramó la sangre de los sirios […], en la cual el Reino Unido fue un actor principal mediante su apoyo ilimitado a las agrupaciones hostiles”, ha dicho una fuente oficial del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores a la agencia oficial siria de noticias, SANA.
Del mismo modo, ha denunciado que Hargreaves ignoró las “coercitivas” sanciones estadounidenses y británicas contra la nación siria, las cuales suponen una “violación flagrante de los principios del derecho internacional humanitario y los derechos humanos más elementales”.
El Reino Unido inició desde diciembre de 2015 el lanzamiento de bombardeos contra el país árabe, bajo el pretexto de atacar las posiciones terroristas.
Desde entonces, un gran número de civiles sirios ha muerto como consecuencia de los ataques del Reino Unido y se han reportado varios hechos desestabilizadores en Siria con la implicación directa de las fuerzas británicas.
En febrero de 2019, el Ministerio de Defensa del Reino Unido reconoció que, a pesar de que el Parlamento de este país limitó su intervención a ataques aéreos en Siria, Londres tiene desplegado en el país árabe un número no especificado de efectivos del Servicio Aéreo Especial.
El Gobierno de Damasco ha exigido en múltiples ocasiones la salida de las fuerzas extranjeras, las occidentales y británicas incluidas, del suelo sirio, advirtiendo del respaldo que estas brindan a los terroristas contra los que luchan las fuerzas sirias.
Siria señala, además, que el tema de la democracia y los derechos humanos que el Occidente utiliza para agredir a Damasco, les sirve a EE.UU. y Europa como excusa para materializar sus objetivos nefastos, entre ellos el lanzamiento de guerras.
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