Los medios iraquíes han informado la madrugada de este martes (hora local) que se han escuchado explosiones en la ciudad de Jurf al-Sajar, en la provincia de Babilonia (centro). Las explosiones han sido causadas por ataques aéreos contra una zona que alberga posiciones de las fuerzas iraquíes.
La ofensiva ha sido una medida de EE.UU., que forma parte de sus intentos por desestabilizar Irak con el despliegue, de nuevo, de elementos del grupo terrorista Daesh, según ha informado la cadena local Al-Ghadir, citando una fuente anónima.
De hecho, ha agregado, el propósito de los ataques de EE.UU. es trasladar a los terroristas de la aludida banda takfirí a Jurf al-Sajar desde la frontera siria, especialmente desde la base de Al-Tanf, ocupada por Washington y sita en el extremo suroriental de la provincia siria de Homs (centro).
Conforme ha denunciado la fuente, la agresión estadounidense contra las posiciones del Ejército iraquí se ha saldado con cierto número de muertos y heridos; sin embargo, no ha ofrecido más detalles al respecto.
El ataque se produce en momentos en los que las Fuerzas Armadas iraquíes están aunando esfuerzos para garantizar la seguridad de las zonas fronterizas entre Irak y Siria ante las actividades terroristas.
En contraposición, como han alertado varias figuras nacionales de Irak y Siria, así como muchos expertos, EE.UU. tiene la intención de renovar la estructura de la organización terrorista Daesh y facilitar el movimiento de sus elementos entre ambos países árabes.
De este modo, de acuerdo con un reporte publicado el 14 de enero por la cadena libanesa de televisión Al-Mayadeen, Washington quiere justificar su presencia en Siria e Irak, so pretexto de combatir a la banda takfirí.