Arabia Saudí sufre una recesión económica por la caída de los precios del petróleo en el año pasado, que ha causado la perdida de millones de puestos de trabajo.
Esta y otras circunstancias ha provocado que cientos de personas se echaran a la calle para manifestarse contra las políticas económicas del régimen de los Al Saud en la región de Casim (al norte de Riad, la capital).
Medios locales informan que, al mismo tiempo que las medidas de seguridad se han intensificado en varias ciudades de Arabia Saudí debido a la creciente ira pública contra las políticas económicas del régimen saudí, cientos de personas se reunieron el lunes por la noche en la ciudad de Buraidá en la región de Casim.
Las manifestantes protestaron contra los aumentos de impuestos, las restricciones de viaje y cuarentena impuesta por el nuevo coronavirus —causante de la COVID-19—, y el aumento de la pobreza y el desempleo en Arabia Saudí.
Entretanto, estallaron enfrentamientos con las fuerzas de seguridad durante las manifestaciones y la Policía de la región anunció que varios ciudadanos fueron detenidos por violar las restricciones por el coronavirus.
Así está el país cuyos miembros del regímen son tan amigos de los monarcas españoles, tanto del emérito como del actual e ilegítimo jefe del Estado, Felipe VI.
