Tras un prolongado autocontrol, es decir, de cumplimiento unilateral de las distintas treguas, los defensores de Donbass han recibido permiso para responder al enemigo, que día tras día bombardea localidades de la RPD/RPL. No pregunten qué quiere decir la prohibición de responder al fuego, pero es una épica que ha elegido Donbass, que, por algún motivo, ha dado ventaja a la parte agresora, Ucrania. Parecían decir: puede que los patriotas entren en razón y acepten acordar una resolución pacífica al conflicto. Pero no es así. Como muestra la experiencia de los últimos días, el camino al infierno está lleno de buenas intenciones: cuanto más condescendiente se es con los “socios”, más inagotable y parasitarios se convierten.
“Estaba en Oktyabrsky y escuché a las ancianas hablar de los últimos bombardeos con un vocabulario bastante profesional: saben determinar desde dónde llegaron, dónde impactaron, pero no saben determinar el tipo de munición, así que lo describían con palabras del día a día como algo potente, algo menos potente. Cuando las mujeres estaban hablando de ello, empezó. A veces salgo de la República, por suerte me dejan volver, pero esto no se marcha nunca. Me encuentro como en una canción: no estoy en la guerra, la guerra está en mí. No quiero creer que pueda haber un tiempo en el que esas mujeres digan: ¿Recuerdas, bombardean como hace cinco años?”, afirmó el excomandante del batallón Vostok Alexander Jodakovsky.
Como se suele decir, la paciencia se ha agotado. Ahora Ucrania tiene la posibilidad de sentir el peso del “hierro” que ellos “regalan” a diario a los residentes de la República.
“Nuestra arta ha estado lloviendo sobre los ucros durante un rato. Lo principal es no para para que el sombrero napoleónico de Zelya [Zelensky] vuele para siempre”, escribió el canal de Telegram Bezsonov No Oficial (plataforma informativa del viceministro de información de la RPD Daniil Bezsonov).
“Inconvenientes. Inconvenientes que se veía venir desde hace tiempo. Líneas claras. Por fin nuestros chicos han salido a trabajar. Llevamos seis años esperando”, escribió el canal de Telegram de Donetsk Makarenko.Live, que no escondió su admiración por la respuesta al fuego ucraniano.
Como era de esperar, la parte ucraniana gritó “¡Pero esto qué es!” en su comunicado matutino en la página oficial de la Operación de Fuerzas Conjuntas en las redes sociales. Comenzaba con las palabras “¡Gloria a Ucrania!”
Los castigadores ucranianos están indignados porque las “fuerzas rusas de ocupación” han hecho caer unos puñados de hierro sobre sus posiciones, han usado lanzagranadas y ametralladoras pesadas contra los “heroicos” soldados de Ucrania. Y eso hace surgir la pregunta: ¿Qué esperaban?
Por cierto, tras la orden de destruir posiciones de tiro, el Ejército Ucraniano comenzó a trabajar con grupos móviles: ahora están disparando desde los límites de las ciudades, utilizando los sistemas Partisan y mortero. Es decir, al estilo ISIS, como informaba el corresponsal militar de la RPD Andrey Rudenko. Sin embargo, nada de eso puede sorprender: simplemente intentan poner en práctica lo que los instructores les han enseñado en todo este tiempo.
En general, la situación es la siguiente: durante un tiempo, ambos bandos trabajarán activamente en ciertas zonas del frente, lo que incluye el uso de artillería. No es ningún secreto que hay trenes con equipamiento militar que se están desplazando hacia el territorio de las regiones del este de Ucrania: esas “caravanas” son registradas en foto y en vídeo por residentes locales y después se ponen a disposición del comando militar de la RPD/RPL.
Esta semana, según el informe de la misión de observación de la OSCE, han “desaparecido” de sus lugares de depósito del Ejército Ucraniano: 19 unidades de tanques T-72, 64 T-64, 3 unidades de artillería autopropulsada Acacia, 6 unidades Gbozdika, 98 unidades de howitzers de 152mm. Todo ello está siendo acercado a la línea del frente.
Además, hay información que afirma que las tropas ucranianas acumulan infantería de asalto en la zona de Gorlovka (puede que estén preparándose para asaltar nuestras posiciones en las afueras). Según la inteligencia de la RPD, mercenarios extranjeros que trabajan en el bando ucraniano están siendo trasladados a la línea de contacto.
