“Estados Unidos y el E3 [Alemania, Francia y el Reino Unido] han sido transparentes sobre sus transgresiones y han declarado repetidamente su mala intención de obligar a Irán a renegociar las disposiciones [del acuerdo nuclear] mediante la presión económica y el chantaje” ha subrayado este viernes el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif.
En una carta enviada al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, el jefe de la diplomacia de Irán ha asegurado que durante años, Teherán ha cumplido sus compromisos con el acuerdo nuclear ―de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)― mientras la parte europea y Washington “hablan de boquilla” sobre sus obligaciones contractuales.
Zarif ha denunciado que tras la retirada unilateral de EE.UU. en 2018 del PIAC, la troika europea y el propio país norteamericano creían que podían cosechar los frutos de su “árbol venenoso” sobre el pacto nuclear, agregando que estos países recurren a la frase de “el mío es mío y lo que es tuyo es negociable” para renegociar el pacto con Irán.
Para el canciller iraní, no hay diferencia alguna entre la postura del expresidente estadounidense Donald Trump o el actual mandatario del país norteamericano, Joe Biden, pues, el jefe de Estado demócrata sigue el “terrorismo económico” de su antecesor y aún no ha dado pasos para levantar las sanciones asfixiantes contra la nación persa.
En esta misma línea, el alto diplomático iraní ha enfatizado que a pesar del “desprecio” de Estados Unidos por el acuerdo nuclear, el Gobierno y el pueblo iraníes han hecho “enormes sacrificios” para preservar el pacto.
“Como ha demostrado la historia, el pueblo iraní ha triunfado a lo largo de su gloriosa y milenaria civilización sobre la intimidación, la coacción o la extorsión”, ha afirmado Zarif.
Además, ha dejado claro que a pesar de todo lo sucedido, la República Islámica de Irán está dispuesta a contribuir a los esfuerzos serios para la implementación completa del PIAC “en una atmósfera de buena fe, igualdad de condiciones y el respeto mutuo”.
Tras su salida del acuerdo hace tres años, EE.UU. reimpuso todas las sanciones que se habían levantado en virtud del pacto, e impulsó una campaña de “máxima presión” para obligar a Teherán a sentarse en la mesa para dialogar otro pacto.
El país persa, en respuesta, empezó a reducir de forma gradual sus compromisos en virtud de los artículos 26 y 36 del PIAC. Las autoridades iraníes insisten en que cualquier regreso de Washington al convenio de Viena pasa, primero, por el levantamiento de absolutamente todas las sanciones.