“Hemos usado la fuerza contra nuestros enemigos en el pasado”, expresó el funcionario al portal noticioso Walla.
Schuster evitó pronunciarse sobre una explosión ocurrida la víspera cerca de la planta nuclear iraní de Natanz, aunque las autoridades de ese país anunciaron que fue motivada por la prueba de un misil.
“A un hombre no se le pregunta qué hizo por la noche”, se limitó a decir el viceministro sobre el tema.
El jefe del Mossad (servicio de inteligencia exterior), David Barnea, afirmó la pasada semana que esa institución hará “lo que sea necesario” para impedir que la nación persa obtenga armas nucleares.
Las autoridades de Teherán afirmaron en reiteradas ocasiones que su programa tiene fines pacíficos con el objetivo de generar energía eléctrica, y advirtieron que responderán si son atacados.
En varias ocasiones tanto el ministro israelí de Defensa, Benny Gantz, como el jefe de Estado Mayor del Ejército, general Aviv Kohavi, afirmaron que las fuerzas armadas desarrollan un plan contra Irán.
“Es un trabajo muy complicado, con mucha inteligencia, mucha capacidad operativa, mucho armamento. Estamos trabajando en todos esos temas”, subrayó Kohavi en septiembre en una entrevista con Walla.
Hace unos días, el diario electrónico The Times of Israel reveló que la Fuerza Aérea nacional (IAF) comenzará en los próximos meses un programa de entrenamiento para un eventual ataque a las instalaciones nucleares iraníes.
La IAF bombardeó en 1981 un reactor nuclear iraquí, acción que provocó duras críticas de la comunidad internacional y la aprobación de dos resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que condenaron la incursión.