En la novena jornada de la operación especial en Ucrania, el ejército ruso avanzó en el control de los principales territorios, mientras combatía contra efectivos que usan a la población civil como escudo, pues le prohíben salir de sus casas, e instalan armamento pesado en barrios residenciales, a fin de provocar contrataques que les sirvan de pretexto para acusar a Rusia.
En la jornada transcendió que el Servicio Federal para la Supervisión de Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Medios de Comunicación ruso (Roskomnadzor) anunció que bloqueó el acceso a Twitter y a Facebook en su territorio, en respuesta a la discriminación hacia medios de comunicación rusos por parte de estas redes sociales.
También fue noticia que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski podía haber marchado a Polonia, pero la Rada Suprema (Parlamento ucraniano) lo negó.
Hasta el momento no parecen claras las soluciones diplomáticas para el conflicto. Este viernes, unidades de nacionalistas ucranianos sabotearon la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, para incriminar a Rusia, declaró el Ministerio de Defensa.
El incendio dañó al edificio administrativo pero no la planta ni los reactores. El Organismo Internacional de Energía Atómica confirmó que no hay liberación de radiación.
El presidente Vladímir Putin recordó que su país no alberga odio contra las naciones vecinas. «Pienso que todos debemos pensar en normalizar las relaciones», afirmó, e instó a la comunidad internacional a colaborar y desarrollarlas con normalidad.
La Duma Estatal (Cámara Baja del Parlamento ruso) aprobó enmiendas al Código Penal, que prevén sanciones por la difusión de información falsa sobre las acciones de las Fuerzas Armadas, y por incitar nuevas medidas contra el país, informó RT.
La Autoridad del Canal de Panamá rechazó un posible cierre de sus aguas a los buques rusos, y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, negó el envío de armas a Ucrania, pues aboga por la paz.
Mientras la guerra se mantiene y la mesa de diálogo debe reanudar sus sesiones en la próxima semana, Occidente, la OTAN y EE. UU. incentivan los odios, en tanto el ejército ruso confirma que avanza y cumple con los objetivos propuestos.
